Kiev (AFP).
El presidente ucraniano, Viktor Yanukovich, negó este jueves que el acuerdo económico con Rusia impida acercarse a la Unión Europea (UE), pero precisó que Ucrania podría integrar parcialmente la unión aduanera liderada por Moscú.
Además el mandatario de Ucrania denunció la "injerencia" de los occidentales que apoyan a la oposición pro UE.
En una entrevista televisada, Yanukovich, negó que los acuerdos económicos con Rusia estén en contradicción con el acercamiento a la UE, respondiendo así a críticas opositoras, como las de la exprimera ministra encarcelada, Yulia Timoshenko.
"No están en contradicción con los proyectos de integración. Se trata de relaciones económicas", declaró el mandatario, al preguntársele si lo acordado con Moscú ponía en entredicho un posible acuerdo de asociación con la UE.
Yanukovich también mencionó que su país se podría adherir a "ciertas cláusulas" de la unión aduanera que integran Rusia, Bielorrusia y Kazajistán.
"El gobierno ucraniano recibió hoy (jueves) los documentos y los está examinando. Luego (...) decidiremos a qué cláusulas nos adherimos y a cuáles no nos adherimos y con qué condiciones", dijo.
Por último, el presidente denunció la "injerencia" de los dirigentes de potencias occidentales que salieron al encuentro de manifestantes opositores en Kiev.
"Me opongo categóricamente a que otros vengan a nuestro país y nos enseñen cómo tenemos que vivir", declaró a la televisión, después de que dirigentes de la UE y Estados Unidos, como el senador John McCain, salieran al encuentro de manifestantes en Kiev.
El mandatario replicó de este modo a críticas de la oposición.
Timoshenko había estimado el miércoles que "Yanukovich colocó a Ucrania bajo el control político, militar, energético, económico y financiero de Rusia", volviendo imposible firmar un acuerdo de asociación con la UE.
Los responsables de la UE se mostraron más moderados el miércoles, un día después de la visita de Yanukovich a su homólogo ruso Vladimir Putin, y del anuncio en gran pompa de los acuerdos en el Kremlin.
Mediante estos acuerdos, Rusia otorga $15.000 millones a Ucrania comprando obligaciones ucranianas, baja en un tercio el precio del gas que le vende, al nivel preferencial reservado a algunos países de la ex Unión Soviética, y levanta los obstáculos al comercio impuestos en los últimos meses.
Para firmar el acuerdo de asociación con la UE, Ucrania hubiera debido aceptar las condiciones del Fondo Monetario Internacional, como el aumento de los precios del gas para los particulares, la devaluación de la divisa nacional y la congelación de los salarios, y continuar comprando gas a precios elevados.