San José.
La agencia Moody’s degradó este jueves 9 de febrero la nota de calificación de riesgo de Costa Rica debido alto crecimiento de la deuda pública del país como porcentaje de la producción, la cual finalizó el 2016 en casi el 50% del producto interno bruto (PIB).
La calificadora estadounidense consideró que el país tiene cada vez menos flexibilidad fiscal y un perfil débil.
Moody's pasó la nota del país de Ba1 a Ba2 con perspectiva negativa, esto significa que los bonos de Costa Rica en el extranjero son catalogados como especulativos.
LEA: Deuda pública sobrepasa por segundo año peligroso umbral
Aquellos emisores con calificación Ba demuestran una calidad crediticia inferior a la media de los emisores y se consideran de grado especulativos; el numeral 1 significa que las obligaciones de este emisor se ubican en el nivel superior de su calificación genérica, y al bajar al numeral 2 (Ba2) lo que implica es que están en el rango medio del ranquin.
La calificadora prevé que el pago de intereses signifique 19% de los ingresos del Gobierno en el 2017, lo cual considera negativo para el país.
"La baja en la calificación de riesgo de parte de la empresa Moody's, anunciada esta tarde, es sumamente preocupante, aunque no nos sorprende. Lo hemos venido advirtiendo de manera insistente ante la falta de decisión de la Asamblea Legislativa para avanzar en la modernización de los impuestos al valor agregado y sobre la renta", aseguró Fernando Rodríguez, ministro a. i. de Hacienda.
ADEMÁS: Precios de bonos ticos muestran pocos cambios tras baja en calificación de Fitch
Rodríguez mencionó que la baja en la calificación significa que el país se vuelve más riesgoso para las inversionistas y que esto puede traer ajustes en el tipo de cambio y en las tasas de interés.
Adriana Rodríguez, gerente senior de análisis económico Scotiabank, explicó que la calificación de Moody’s respecto a la deuda, o al perfil de riesgo del país, no se descartaba de parte del mercado, ni tampoco se veía descartado en los rendimientos de los bonos.
“Ya desde hacía dos años nos había indicado el tema de la reforma fiscal y el peligro que ellos ven en el crecimiento de la deuda y el gasto que esto implica por intereses en el presente y en el futuro, y entonces una vez que nos habían puesto en perspectiva negativa, el siguiente paso, si no habían cambios, que no los hubo, era una disminución en la calificación”, comentó.
Meses en retroceso. En febrero del año pasado Moody's cambió la perspectiva sobre la deuda soberana de Costa Rica de estable a negativa, al tiempo que afirmó la calificación de riesgo en Ba1, que es la misma que se mantenía desde setiembre del 2014.
La medida se justificó debido al atraso que tiene el país en la aprobación de medidas para enfrentar el problema fiscal.
La calificación nacional de largo plazo de Moody’s es una opinión de la calidad crediticia relativa de un país en particular y sus emisiones.
Moody's es la segunda calificadora que reduce la calidad de riesgo de Costa Rica en menos de un mes.
El 19 enero anterior, la agencia Fitch Ratings la degradó por los grandes déficits fiscales y la falta de reformas legales para solucionar el problema del rápido crecimiento de la deuda pública.
LEA: Fitch rebaja nota de riesgo de Costa Rica por gran déficit fiscal y falta de reformas
Fitch bajó la calificación del país desde BB+ negativa hasta BB con perspectiva estable. Esto significa que las emisiones de valores del país, en el mercado internacional, son de categoría especulativa.