Desde finales del siglo 19, aproximadamente 1886, algunos médicos y químicos sabían que en la leche materna existía un factor bifidogénico, al cual le atribuían el milagroso poder de evitar infecciones y muertes en los niños que eran alimentados exclusivamente con lactancia materna.
Después de muchos años de investigación científica, se llegó a la conclusión que ese factor está compuesto por una fracción de azúcares muy peculiares: oligosacáridos que se encuentra únicamente en la leche humana, razón por la que se les denomina “oligosacáridos de leche humana”, (HMOs por sus siglas en inglés).
Los HMOs constituyen el tercer componente sólido más importante de la leche materna, son carbohidratos simples y complejos, que poseen una amplia variedad de funciones, algunas recién descubiertas. Aunque no se conoce aún por completo toda su funcionalidad, una de las más importantes es servir como señuelo para que las bacterias malas (patógenas), no puedan colonizar ni infectar el intestino de los niños.
Estos carbohidratos son estructural y funcionalmente diferentes a los prebióticos vegetales (alimento para bacterias buenas en el intestino), y a los fructooligosacáridos que se pueden conseguir en la dieta normal, como es el caso de algunas leguminosas, verduras y frutas.

Los oligosacáridos humanos solo se encuentran en la leche materna. Además de tener un efecto prebiótico (alimento de bifidobacterias buenas que colonizan nuestro intestino para evitar infecciones contra bacterias patógenas), también pueden apoyar la maduración del sistema inmune de defensa del organismo, tanto la inmunidad innata (células receptores), como la adaptativa (productor de defensas como las inmunoglobulinas).
Estos oligosacáridos de leche humana también tienen la capacidad de promover un ambiente de equilibrio para que nuestro cuerpo genere beneficio y estabilidad para mantenerse con salud.
Y, por si fuera poco, también se ha encontrado que confieren múltiples beneficios para la madurez cerebral a lo largo de nuestras vidas.
Nestlé, gracias a sus Departamentos de Investigación y Tecnología innovadora, ha lanzado al mercado el alimento lácteo NAN® SUPREME 3, producto al que ha podido agregar 2 oligosacáridos sintéticos, estructuralmente idénticos a los encontrados en la leche humana. De esta manera, pone estos novedosos recursos al servicio de los niños en crecimiento que no puedan contar con el beneficio de la leche materna, por alguna razón de peso, como sería las madres contagiadas por VIH, las madres que están tomando quimioterapia o alguna justificación médica que impida la lactancia materna.
AVISO IMPORTANTE: LA LECHE MATERNA ES EL MEJOR ALIMENTO PARA EL LACTANTE. Este producto no debe ser utilizado para la alimentación del lactante. Alimento lácteo NAN® SUPREME 3 consumir a partir de los 24 meses. Marcas registradas usadas bajo licencia de su titular Société des Produits Nestlé S.A., Case Postale 353, 1800 Vevey, Suiza.