Víctor Fernández G.
Si algo caracteriza a la entrega 77 de los premios Oscar es que la ficción, al menos este año, perdió la partida con la realidad.
Buena parte de los filmes que esta noche aspirarán por las estatuillas están basados en hechos y personajes reales, rompiendo la tendencia de los últimos años en que megaproducciones de ficción como El señor de los anillos marcaron la pauta. Ahora basta con ver que tres de las cinco cintas que optan por el Oscar a la mejor película son versiones hollywoodenses de la vida de seres humanos nada ordinarios.
Todo empieza por El aviador , filme que llega con la mayor cantidad de candidaturas -11 en total- y que se basa en la vida del excéntrico magnate de Hollywood y pionero de la aviación Howard Hughes.
Para mejor filme del año también optan otras dos obras basadas en personas que sí existieron: Ray , sobre la vida del virtuoso del soul Ray Charles, y Descubriendo el país de Nunca Jamás , que relata la vida de James Matthew Barrie, el autor de Peter Pan .
Verídicos. La competencia basada en personajes reales se hace más intensa aún en la categoría de mejor actor principal, donde cuatro de los cinco participantes están ahí por sus interpretaciones de personajes históricos.
Los cuatro concursantes "de verdad" son Leonardo DiCaprio -que hace a Hughes-; Johnny Depp, por su papel de Barrie; Jamie Foxx, por su encarnación de Charles, y Don Cheandle, quien dio vida en la pantalla grande a Paul Rusesabagina, el administrador de un hotel que da refugio a varios perseguidos por la violencia étnica en Hotel Ruanda .
La realidad también tiene peleando por un Oscar a otros intérpretes, como el veterano Alan Alda, quien está nominado al mejor actor secundario por su papel del senador Ralph Owen Brewster en El aviador
El apartado de mejor actriz secundaria reúne a tres candidatas que encarnaron a mujeres verdaderas: Cate Blanchett, quien hace a la diva Katharine Hepburn en El aviador ; Laura Linney, encargada de darle vida a Clara, la esposa del teórico sexual Alfred Kinsey, en Kinsey ; y la británica Sophie Okonedo, quien hace a la esposa tutsi de Rusesabagina en Hotel Ruanda .
La vida real también tiene peso en la categoría de mejor película extranjera, donde participan la española Mar adentro -basada en la batalla que llevó durante 30 años el tetrapléjico Ramón Sampedro, interpretado por Javier Bardem, para poner término a su vida- y la controvertida producción alemana La caída , que está basada en los últimos días del líder nazi Adolfo Hitler.
Sin embargo, dos de las más grandes producciones del 2004 inspiradas en hechos históricos se quedaron, por mucho fuera, de la pelea. La primera, y más notoria de las ausencias, es la de La pasión de Cristo, la controvertida presión de Mel Gibson sobre las últimas 12 horas de la vida de Jesús. La película, a pesar de su extraordinario éxito dee taquilla, fue relegado a solo tres postulaciones en apartados estrictamente técnicos.