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La posibilidad de ser finalmente libre es cada vez más lejana para Steven Avery, quien protagonizó la serie documental Making a Murderer, de Netflix.
La jueza de Winsconsin Angela Sutkiewicz le negó la posibilidad de someterse a un nuevo proceso legal. Avery fue encarcelado en el 2007, acusado de violar, matar y mutilar a la fotógrafa Teresa Halbach.
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Making a Murderer trajo una tormenta sobre el sistema judicial estadounidense el año pasado, cuando en la pantalla de Netflix mostró el extraño caso de Avery: encarcelado durante 18 años por un crimen que no cometió, liberado en el 2003 tras desenpolvar las muestras de ADN y luego aprisionado de nuevo dos años más tarde, con una sentencia de cadena perpetua.
"Dada la totalidad de la evidencia que se presentó en el juicio y las ambigüas conclusiones de los reportes de expertos, no puede decirse que existe una probabilidad razonable de que se logre un resultado diferente con un nuevo juicio, basándose en estos reportes", explicó la jueza Sutkiewicz ante la solicitud de la abogada de Avery, Kathleen Zellner, de un nuevo proceso judicial.
"Tenemos nuevas pruebas y testigos. Los resultados científicos no están aún revisados y somos optimistas con que se exonerará al señor Avery", comentó a la revista Rolling Stone Zellner, quien no pierde la esperanza de que se haga justicia para su representado.
