Fiesta total: ese fue el ambiente que durante cinco horas fomentaron La Milixia, Los Govinda, Sonámbulo, Akasha, Maskatesta y Perrozompopo, artistas invitados al concierto de presentación del nuevo disco de Percance, Contra el viento y a la grabación de un DVD.
En pleno corazón de San José, en la plaza de la Democracia, miles de jóvenes llenaron los espacios disponibles para sacarle el jugo a este maratónico concierto.
Desde la 1 p. m., un cielo nublado y una brisa constante presagiaban que habría lluvia, mas eso no le quitó el impulso a aquella legión de entusiastas.
La Milixia subió al escenario a la 1:15 p. m. con una energía contagiosa. Frente a la tarima, se dejaron poseer por la energía y cantaron al ritmo de temas como Sol latino , en el que recordaron las raíces indígenas de los pueblos latinoamericanos.
El ska de La Milixia también sirvió para reflexionar sobre la conservación de los recursos naturales; un buen ejemplo fue el tema “Recuerdo río” .
“Muchas gracias por venir, de parte nuestra, muchísimas gracias por la invitación y gracias a ustedes, hermanos, por apoyar esto. Nos llevamos las mejores vibras, un honor”, dijo Donovan Camacho.
Además, La Milixia interpretó Nubes , un clásico de los Caifanes, pero lo hizo con un estilo propio que fue aplaudido tanto por quienes desconocían la existencia de la versión original, como por los que la la descubrieron en la década de los 90, en la voz de Saúl Hernández.
Fiesta con lluvia. Los Govinda y Pedro Capmany llegaron después para compartir esa música que crearon y ya es parte del público. Lo nuevo fue Viaje cósmico , que estará en un futuro disco, pero la conexión más importante con la audiencia la lograron con De la caña se hace el guaro, infaltable en los conciertos de José Capmany, padre de Pedro y, para muchos, patriarca del rock nacional.
A eso de las 2:15 p. m., cuando Los Govinda casi terminaban su presentación, apareció la única invitada no deseable: la lluvia.
Algunos salieron en busca de refugio, pero otros simplemente dejaron que el agua se sumara con ellos a la fiesta.
Más tarde, le llegó el turno a Akasha, una banda que sabe muy bien cómo meter al público en su show. Lo hizo con Mauni al frente, interpretando Descriptar , En el espejo y Alunizar .
Su participación también sirvió para compartir Revoluciones , canción que estará en el próximo disco de los Akasha.
“Bienvenidos a esta fiesta de la música nacional. Nosotros (las bandas nacionales) somos una gran hermandad, no importa el género, somos la misma familia”, dijo Mauni durante su participación.
Los minutos transcurrían veloces, algo que suele pasar cuando todo el mundo la está pasando tan bien. En cuanto a la lluvia, se mostraba indecisa: no sabía si irse o quedarse.
Cuando a Sonámbulo le llegó su momento de subir a la tarima, el agua dio una tregua, aunque para entonces, ya a nadie parecía importarle mojarse. Todos bailaron al ritmo de su funk y su cumbia.
Con Hermanos Smith y Manifiesto, el grupo entró en calor, pero fue al interpretar La maraca cuando en verdad se desató la euforia en la plaza de la Democracia.
La banda tocó y se despidió, pero el público con sus aplausos logró sacarles “¡otra, otra!”. La despedida la protagonizó “Chusma funk”, tema de su primer álbum.
El tramo final de esta primera parte estuvo a cargo de extranjeros: primero fue Maskatesta, de México. Vestidos de saco y corbata, interpretaron Fiesta Ska , Tan simple como el amor , y Viejo bar .
“¡Chin chin el que no baile, cabrones!”, exclamó Israel Kabula, el vocalista, al tiempo que disfrutaba de su intensa conexión con los ticos.
A Perrozompopo le tocó su turno cuando el cielo se puso muy oscuro. Pero una combinación de temas románticos, como Entre remolinos , y otras piezas de crítica social, como Perrozompopo y Quiero que sepas, bastó para que fuera estupenda la acogida.
“Mil gracias por el aplauso, por cantar y por abrirme las puertas de este país”, dijo Perrozompopo a las 5:28 p. m..
De ahí en adelante, la noche sería de Percance.