Con miedo y hasta un poco de inseguridad, la modelo Karina Ramos Leitón denunció este jueves 22 de julio en sus redes sociales a un hombre quien, según contó, la ha estado acosando desde hace aproximadamente seis meses.
En entrevista con Viva, la también presentadora y empresaria aseguró que esta fue una forma desesperada de pedir ayuda, pues afirma que ha hecho todo lo que ha estado en sus manos para detener al presunto acosador; sin embargo, todos sus intentos han sido en vano.
“Yo me estaba volviendo loca y dije: ‘lo único que queda por hacer es hacerlo público, porque yo ya no tengo más herramientas’. Es que ¿qué más puedo hacer?, no puedo hacer nada. Me siento incapaz de tomar alguna otra decisión que me pueda ayudar con esta situación. Lo único que puedo hacer es pedirle ayuda a la gente, que si alguien lo conoce que me ayuden a calmarlo o que, si algo me pasa, simplemente tengo a la gente de testigo.
“Y la verdad tenía mucho miedo de compartir esto, porque uno nunca sabe cómo va a reaccionar la gente, uno no sabe cómo van a responder con algo así. Tenía mucho miedo de compartirlo porque es algo muy personal. Es una persona inestable, es una persona peligrosa. Ojalá las personas que estén cerca de él le puedan decir que se detenga. Yo necesito que alguien más me ayude, porque esto no está funcionando de ninguna manera. Fue un acto de desesperación“, aseveró.
Karina detalla que todo comenzó a inicios de este 2021, cuando el hombre, al parecer, le comenzó a escribir a través de su cuenta de Instagram. Cuando ella comenzó a percibir situaciones extrañas optó por bloquearlo, pero el supuesto acosador creaba más perfiles para seguirle escribiendo.
En ese momento ella dejó pasar la situación.
Sin embargo, la Miss Costa Rica 2014 asegura que el problema siguió escalando y el supuesto acosador se habría matriculado en su academia de modelaje, Imagination Empowerment School. Incluso, fue hasta el condominio en el que ella vive para alquilar un apartamento.
“Ya es demasiado tiempo. Yo intenté diciéndole, por medio de la academia, que no podía volver. Intentamos llamando a la Policía un día que llegó le hicieron un parte y le dijeron que ya no podía volver a contactarme y sigue sin funcionar (...). Ahora los mensajes son agresivos: me insulta, me dice que no me va a dejar en paz hasta que me tenga, entonces son mensajes que al fin y al cabo uno no sabe hasta que punto puede tener una repercusión real, más allá de un mensaje”, afirmó.
Llamado
La presentadora de Telehit dice que esta no es la primera vez que la acosan. La diferencia, según ella, es que esta vez el acoso ha sido constante por varios meses y no cesa. Por ello, ahora hace un llamado para no minimizar este tipo de situaciones.
“A mí me ha pasado que yo digo: ‘Ay, no es para tanto’, ‘realmente no ha pasado nada’, ‘realmente no se me ha acercado tanto’ (...) yo misma e intentado minimizar el asunto. Otras veces decía: ‘No, no lo voy a hacer más grande’, ‘no entiendo por qué me siento tan mal, si no debería de sentirme mal’. No es justo que yo o que cualquier otra persona esté pensando y ‘¿qué paso tengo que dar para saber si me están viendo o no, si se puede llegar a acercar o no? Ese sentimiento de una persecución es insoportable.
“La sociedad está tan mal en este momento que hemos normalizado que nos griten en la calle, recibir insultos muchas veces, tener relaciones tóxicas y no solo las mujeres, yo sé que también hay hombres que tienen relaciones tóxicas de esta manera e ir normalizando situaciones como estas hacen que una situación como la mía parezca también normal.
“Ante una situación de acoso, de abuso, lo mejor es a la primera señal, alejarse. ¿Para qué más?, ¿para qué llegar al punto que estoy yo, que tengo demasiado miedo?, a la primera hay que buscar a las autoridades, hay que actuar y hay que contarle a alguien porque uno no puede pasar por esto sola, es más peligroso. ¿Qué pasa con todos esos casos de mujeres desaparecidas?, probablemente pasaban por algo similar y nunca le contaron a nadie, entonces desaparecen y nadie sabe lo que está pasando”, argumentó.
Karina decidió hacer pública la situación tan solo horas después de llegar a México, pues reconoce que ahora en Costa Rica no se siente ni tranquila, ni mucho menos segura.