EscucharEl polémico dirigente universitario Fernando Coto Martén, mejor conocido como Cotico , quiere que la sociedad costarricense también conozca su faceta de escritor.
El sociólogo acaba de publicar sus memorias en el libro Cotico en ruta, que ya está a la venta en las principales librerías del país.
“Con esta obra quise hacer justicia a la memoria histórica y cultural sobre muchos hechos que no han sido contados como fueron en realidad”, dijo el autor, quien a labora en el Área de Salud de la CCSS en Buenos Aires, Puntarenas.
Con 56 años, Cotico se mantiene fiel a las mismas convicciones contestarias que durante los años 70 levantaron roncha entre los sectores académicos más conservadores de la Universidad de Costa Rica.
La Federación de Estudiantes de la UCR (Feucr) es precisamente uno de los tres homenajeados con este libro , según Cotico .
Sus extravagantes espectáculos en el pretil universitario y sus polémicas consignas no impidieron que fuera elegido presidente de dicha agrupación, en 1974.
El otro dedicado es una de sus más grandes pasiones: el balompié, y especialmente el equipo al que le hacía barra de jovencillo: El club de futbol de la Universidad de Costa Rica. “ Logró llegar a a la Primera División en 1973 y ahí se mantuvo por tres años. Yo creo que es el momento indicado para recordar esas glorias pasadas y apoyarlo para que siga adelante”, explicó.
En la ruta de Cotico no podía faltar una figura fundamental en su vida y en su forma de pensar: su padre, Fernando Coto Albán. “Papá fue magistrado y expresidente de la Corte Suprema de Justicia, y a diferencia de muchos políticos actuales, fue un hombre justo, correcto y honrado”, manifestó.
Según Cotico , fue su progenitor de quien heredó el amor por la cultura popular y por la literatura.
“ Las cuartetas que él componía y los poemas del romancero campesino calaron hondo. Es justo que se conozca su verdadera historia porque él fue un político alejado de la corrupción y por eso le hicieron malas jugadas”, aseguró el sociólogo. El autor dice que su libro es un llamado al rescate de valores.
