La tenacidad de Henrietta Boggs fulgura en la pantalla grande

El destino de cada cual es incierto, pero hay quienes podrían apostar a que siempre elige personas extraordinarias para las más grandes hazañas.

La vida de Henrietta Boggs, la primera esposa del expresidente José Figueres Ferrer, sería perfecta para ejemplificar esta tesis.

Aventurera, rebelde, de espíritu osado. Nada parece haber cambiado en la mujer que estuvo al lado de quien dividió a Costa Rica en dos bandos y enseñó a jóvenes peones a disparar para poner fin a la crisis política de la Costa Rica de 1948.

Con el pelo ahora teñido completamente de blanco por las canas y con 98 años de historias y remembranzas, Boggs es la protagonista del documental La primera dama de la Revolución , de la cineasta estadounidense Andrea Kalin, el cual se estrenará este jueves en cines comerciales.

El filme, de 71 minutos de duración, recoge la historia de una chica de Alabama, Estados Unidos, criada en el seno de una familia presbiteriana y bajo una filosofía obtusa: “No cuestiones. No dudes. Cierra tu mente y cree en lo que debes creer”.

Sin embargo, la joven Henrietta se negaba a pensar que el mundo se reducía a la burbuja sureña en la que la habían metido sus padres y en su interior crecía el interés por atravesar las fronteras hacia aquella de la que se hablaba como “la tierra de la eterna primavera”: Costa Rica.

Claro que el país no era nada de lo que pintaba la comedia musical Carnival in Costa Rica (1947). A su llegada a suelo limonense, Boggs encontró desolación y pobreza.

La muchacha se fue a vivir a una granja de sus tíos y un día de tantos, un hombre de ojos azules llegó de visita, montado sobre una Harley Davidson. Ese era Pepe Figueres.

En adelante, el filme de Kalin relata cómo se desarrolló el romance entre este terrateniente y Boggs, el estallido de la crisis política tras las elecciones del 48, así como el exilio de Figueres y su regreso al país. El documental también enfatiza en el proceso de formación del bando revolucionario, la derrota al calderonismo y la llegada al poder de Figueres.

En todos esos momentos, la voz, el pensamiento y el apoyo de Henrietta Boggs fueron piezas claves para el fundador del Partido Liberación Nacional.

De hecho, en el documental ella misma se define como un “dolor de cabeza”, pues su insistencia fue la semilla que hizo posible la aprobación del derecho al voto para las mujeres.

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La historia relatada en primera persona por Boggs no deja de lado los momentos desconcertantes en su relación con Pepe Figueres, los cuales desencadenaron la partida de Boggs hacia su tierra natal con sus dos hijos: José Martí y Muni.

Llena de bríos. A sus 98 años, la lucidez y el espíritu intrépido de la exprimera dama siguen tan vivos como lo fueron en tiempos de la Guerra Civil.

El sonido de los motores de dos motos pandilleras encendieron la adrenalina en la premier del documental, realizada la semana pasada en el cine Magaly. A bordo de una de las motocicletas, y enfundada en una chaqueta de cuero, Boggs entró en la sala.

“Me parece completamente irreal. Es como un cuento de hadas”, alcanzó a decir tras la proyección.

Llevar a Boggs a ver su propia historia en la pantalla grande fue un sueño hecho realidad para Kalin, quien conoció a la exprimera dama a través de Muni Figueres, en medio de un proyecto para el Inter-American Development Bank.

“Para mí una de las piezas más importantes del éxito del filme es que ella (Boggs) pudiera disfrutar de él en la pantalla grande”, afirma la cineasta estadounidense. “Cuando conocí a Henrietta, fui arrastrada por su personalidad, su fuerza, la historia que ella tenía para contar. Siempre sentí que el reloj estaba corriendo; tenía el tiempo muy limitado”.

Kalin tardó siete años en la producción y el rodaje de este documental, principalmente por la falta de financiamiento.

La cineasta asegura no haber recibido apoyo económico por parte de instituciones costarricenses. “Pienso que la gente estaba preocupada de que mi filme tuviera tintes políticos y que no se pudiera visualizar la historia que intentaba contar, que es una visión neutral de una persona contando su perspectiva y siendo testigo de la historia”, explica.

El documental, sin embargo, fue vitoreado en el cine Magaly y desde hoy se exhibirá ante escolares y colegiales de todo el país.