Un hombre de apellidos Vanegas Castro, conocido como Hiena, permanece en fuga y es buscado por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Alajuela, que este martes desplegó 16 allanamientos para desarticular a una organización que este sujeto lideraba en el sur de esa provincia. Para localizarlo, las autoridades difundieron una fotografía y pidieron a la población que en caso de tener datos sobre su paradero los brinden de manera confidencial al 800–8000–645.
La publicación de la imagen se hizo luego de la captura de 14 integrantes de la banda de Vanegas. Se trata de ocho hombres, apellidados Delgado Espinoza, González Arroyo, Castillo Castellón, Lends López, Rodríguez Centeno, Vílchez Salguero, Altamirano y Zúñiga Miranda, así como seis mujeres de apellidos Centeno, Mendoza, Campos Lends (2), Romero Herrera, Alfaro Gonzalez. Todos tienen edades entre los 19 y 42 años.
A toda la agrupación se le atribuye la comisión de siete asesinatos entre el 2017 y este año, así como una tentativa de homicidio y dos asaltos en ese mismo periodo. Wálter Espinoza Espinoza, director de la Policía Judicial, detalló que este caso es de suma importancia debido a los niveles de violencia con los que actuaba este grupo con el objetivo de controlar la venta de drogas en el sur de Alajuela.
“Este operativo, desarrollado en lugares con dificultad delictiva, nos permiten resolver desarticular a una banda que estaba muy asentada en la zona y resolver siete homicidios que se dieron por confrontaciones entre organizaciones criminales para dominar sectores importantes para la comercialización de droga”, explicó el jerarca judicial.
Sobre Vanegas no hubo muchas referencias, solo el llamado a la ciudadanía a colaborar para capturarlo lo más pronto posible. Sin embargo, se sabe que es él quien maniató, amordazó y asesinó a un joven de 24 años, de apellido Picado, cuyo cuerpo fue localizado en una cuneta de la ruta 27, en su paso por la Guácima, Alajuela.
Posteriormente, luego de poco más de un año de calma comenzó una seguidilla de crímenes, el primero de ellos en junio del 2019, cuando Johan Quintero Zamora, de 22 años, fue asesinado en el parqueo de un supermercado en San Rafael, también en Alajuela. El muchacho, quien tenía antecedentes judiciales por robo agravado y desobediencia a la autoridad, recibió varios disparos y pereció en el lugar. Casi seis meses después, en diciembre del 2019, el cadáver de Michael Briceño Baltodano (37 años) fue localizado envuelto en un cobija en Turrúcares.
Los crímenes no fueron de manera consecutiva, todos mantuvieron la característica de estar espaciados por varios meses. Desde la muerte de Briceño transcurrieron cuatro meses para la comisión de otro asesinato y, en esta ocasión, la víctima fue Jonan Obed Herrera Talavera (29 años), quien viajaba en motocicleta por el poblado del Roble de San Antonio, Alajuela, el 29 de abril del 2020, cuando fue asesinado.
Al grupo también se le señala por una balacera registrada el 8 de setiembre del 2020 en Villa Esperanza de Pavas, San José, la cual cobró la vida de Axel Jafet Blanco Murillo, de 21 años, quien resultó herido y falleció poco después de su ingreso al Hospital San Juan de Dios. Ese año finalizó con el crimen de Greivin Marín Reyes (23), quien fue encontrado en diciembre del 2020 enterrado en las Vueltas de la Guácima.
El último asesinato cometido por la agrupación fue el de Wilson Omar Becerra Villamizar, de 27 años, quien se encontraba en una barbería de San Rafael (Alajuela) el 8 de enero de este 2021, cuando fue asesinado por dos sujetos.
Al grupo también se le vincula con una tentativa de homicidio que data del 24 de agosto del 2020 en San Rafael,cuando resultaron heridos un hombre de apellido Mora, de 35 años, así como su hijo de 16. Ellos “transitaban en motocicleta y, al parecer, miembros de esta agrupación les dispararon e impactaron en varias ocasiones, siendo que estos lograron refugiarse en una vivienda de esa localidad y luego fueron llevados a un centro médico local”, precisó la Policía Judicial en un boletín de prensa.
Finalmente, el OIJ relaciona a la banda con el asalto a un peatón, el 24 de diciembre del 2019, en San Rafael, y con un atraco en una vivienda del Roble, el 19 de octubre del 2020.
Importantes decomisos
Wálter Espinoza detalló que durante las diligencias de este martes, en San Rafael, se incautaron evidencias “importantes” para el caso, entre estas ¢2,5 millones en efectivo, 2.500 dosis y 15 cajetas de crack, 250 dosis de cocaína, 30 dosis de marihuana, munición para arma de fuego AK–47 y AR–15, tres pistolas calibre nueve milímetros y una escopeta de fabricación casera.
En dos de estas casas allanadas se realizaron pruebas luminol y se recolectaron rastros de aparente sangre, pues se presume que dos de los fallecidos por homicidios habrían sido asesinados ahí y luego sus cuerpos fueron dejados en vía pública.
Los detenidos fueron pasados con un informe al Ministerio Público, para que se le determine su situación jurídica.
Información actualizada a las 6:42 p. m. con más datos.