El abogado defensor de Luis Carlos Miranda Izquierdo, uno de los acusados por el homicidio de la anestesióloga María Luisa Cedeño, lleva dos días señalando los “problemas” detectados en la investigación del crimen, perpetrado el 20 de julio del 2020 en el Hotel La Mansion Inn, en Quepos de Puntarenas.
Erick Gatgens Gómez sostiene que el allanamiento y registro del hotel “fue inescrupuloso, no fue exhaustivo, ni detallado” y prueba de ello es que el apartamento de Harry Bodaan, otro de los acusados, no fue allanado el mismo día, sino nueve días después del asesinato.
Aunque la premisa expuesta en el debate por la Fiscalía es que la doctora fue ultimada en su habitación; Margot Arguedas, abogada de otro de los acusados, Teodoro Herrera, sostiene que el asesinato ocurrió en el apartamento de Bodaan o cerca de la piscina del imputado.
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María Luisa Cedeño Quesada y Mafalda su fiel compañera. La perrita estaba en la habitación, cuando ocurrió el crimen. Foto: Archivo
Sin embargo, según cuestiona Gatgens, en esta causa la escena del crimen debió ser todo el hotel, pero los responsables de la pesquisa dejaron muchas áreas de la propiedad sin inspeccionar.
“También se logró determinar, en un allanamiento posterior que se hizo, casi un año después, que hubo una enorme cantidad de áreas que nunca fueron registradas, revisadas y lo peor aún, que se conocieron hasta ese momento, lo que demuestra es que claramente se hizo de manera superficial, se hizo a la carrera, no se tomaron todas las precauciones del caso”, manifestó el abogado en su segundo día de conclusiones, en un debate que cumple siete meses en desarrollo.
Por ejemplo, el día posterior al crimen se descubrió que la habitación 6 estaba sucia y desordenada, pese a que no había huéspedes en ella. Aún así, los investigadores del Organismo de Investigación Judicial no consideraron necesario revisarla, criticó Gatgens.
“Se utilizó un criterio discriminatorio que es absolutamente errado, subjetivo y que no tiene ningún fundamento y fue que, en las habitaciones que supuestamente no estaban ocupadas solamente abrieron la puerta y cerraron, no pasaron el can, no hicieron pruebas de luminol y no hicieron nada”, declaró.
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Está previsto que Erick Gatgens, defensor de Miranda Izquierdo, se extienda cuatro días más en sus conclusiones. (Adrián Galeano Calvo)
Para el defensor, estos problemas pueden ser derivados de la falta de experiencia del especialista de la escena del crimen, Ronny León, y de la investigadora del caso, Raquel Salazar, quien apenas tenía un año en la sección de homicidios y el caso de Cedeño era el primero que atendía en donde convergían violación y asesinato.
“El especialista en la escena del crimen trató la escena muy chapucera. No inventarió todas las medicinas que aparecían en el inodoro, pilosos, no hizo inventario de las prendas que portaba la víctima, la ropa de cama”, cuestionó el defensor.
También criticó que Bako, el perro utilizado para identificar sangre, es un animal que ha fallado en reiteradas ocasiones. Por ejemplo, citó que un mes antes del crimen no logró detectar muestras que eran positivas y que en las bitácoras también se logra constatar que muestras que registra como positivas para sangre, en realidad eran negativas.
Está previsto que la defensa de Miranda Izquierdo concluya en cuatro días más, por lo que ya quedan pocos procesos para finalizar este debate. Quedaría para después de Semana Santa la fijación de la fecha para la lectura del por tanto.