Para el equipo investigador de la Cicig, la cúpula de Gobernación de Guatemala no solo participó en el crimen de los diputados, sino también en dos matanzas de presidiarios.
Aunque levantó la inmunidad de la fiscala Giselle Rivera, el actual comisionado de la Cicig, Francisco Dall'Anese, consideró el testimonio de la tica fundamental para sustentar los cargos en contra de los altos funcionarios.
Los investigadores internacionales apuntan al exministro Carlos Vielman, a su asesor Víctor Rivera Azuaje, al exdirector general de la Policía Nacional Civil, Edwin Sperisen Vernon, el exjefe de la Dirección de Investigaciones Criminales, Víctor Hugo Soto Dieguez y al exsubdirector de la Policía Nacional Civil, Javier Figueroa Díaz, como supuestos autores de ejecuciones extrajudiciales, asesinatos, lavado de dinero, secuestro, extorsiones y robo de drogas, detalla un informe fechado el 3 de noviembre del 2009.
La organización paralela sería la responsable del plan Gavilán , activado a raíz del escape de 19 presos de la cárcel guatemalteca de El Infiernito, el 22 de octubre del 2005.
Ante la sociedad guatemalteca se presentó como un operativo para capturar a los prófugos; la Cicig dijo que, en realidad, se concibió para cazar y ejecutar a cuatro personas “como un principio de limpieza de la sociedad”.
En las acciones de búsqueda –avaladas por el ministro Carlos Vielman y los altos mandos policiales del Ministerio de Gobernación de Guatemala– participaron esa vez 68 policías.
Matanzas. De acuerdo con la Cicig, los agentes nunca tuvieron la intención de aprehender a los reos escogidos; harían creer a la sociedad que los presidiarios cayeron al enfrentarse con la Policía.
Los jefes policiales Rivera (el asesor venezolano) y Soto tuvieron una participación activa en los crímenes, según la Comisión.
Uno de los testigos dijo haber escuchado a los jerarcas mientras rendían informes al ministro Vielman sobre las presuntas labores de exterminio.
Fue así como en acciones separadas al prófugo Estuardo Santacruz le dispararon dentro de un carro, a Humberto Ruiz Fuentes en un callejón y a José María Maldonado y a Julián Morales Blanco en la cueva donde se ocultaban, en la aldea El Cuaje, departamento de Santa Rosa.
La Cicig también acusó a parte de esa estructura paralela de ejecutar el plan Pavo real , destinado a la matanza de siete presidiarios de quienes se decía tenían el control de la gran penal Pavón, en Guatemala.
La matanza ocurrió el 25 de setiembre del 2006. Fueron ejecutados Luis Zepeda, Jorge Batres, Carlos Barrientos, Érick Mayorga, José Tiniguar, Ricardo Ortega y Daniel Oswaldo.