Después de 19 días sin homicidios en el cantón central de Limón, los residentes de Villa Mar fueron testigos de un nuevo ataque a balazos y la muerte de cuatro hombres que estaban dentro en un Toyota Yaris de color gris.
De acuerdo con los vecinos que reportaron el incidente en redes sociales, a la 1:05 p. m. los hombres estaban cerca del antiguo Salón Calipso y aparentemente se dirigían hacia unas cabinas, cuando desde otro vehículo pasaron sicarios y abrieron fuego contra ellos.
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Los hombres se transportaban dentro de un vehículo cuando dos sicarios en una moto pasaron y abrieron fuego. Foto Cortesía.
Cuando se escucharon los disparos, los residentes llamaron a las autoridades a través del sistema de emergencia 9-1-1, quienes enviaron personal de la Cruz Roja y la Fuerza Pública. Sin embargo, al llegar los paramédicos, los cuatro hombres ya no mostraban signos vitales.
“Lo que se tiene es que, estando el vehículo aparcado en este sitio, pasa otro vehículo automotor y dispara en ráfaga contra estas personas, ocasionándoles la muerte. Dentro de la escena, que es compleja y amplia, se encuentran varios casquillos desperdigados en el lugar”, indicó Randall Zúñiga, director del OIJ.
En la escena de este crimen las autoridades confirmaron la muerte de tres personas que viajaban en los asientos traseros del carro y otro más que quedó afuera del vehículo. Zúñiga señaló que las identidades de estas personas aún no ha trascendido; sin embargo, sus edades están entre los 30 a 40 años.
En imágenes que circulan en redes sociales se ven las víctimas con impactos de bala en diferentes partes del cuerpo, principalmente en cabeza y tórax. Por el tipo de heridas se cree que los asesinos utilizaron armas de grueso calibre.
Según el Registro Nacional de la Propiedad, el vehículo aparece a nombre de un joven de 28 años de apellido Hernández, de momento se desconoce si es una de las victimas mortales.
Debido a la forma en que fueron asesinados estos hombres, se sospecha que el incidente está relacionado con un ajuste de cuentas. Poco después del ataque, la Fuerza Pública desplegó un operativo y cierres de vías con el objetivo de capturar a los responsables de las muertes. Hasta el momento se desconoce si hubo resultados.
Este hecho eleva la cifra total de muertes violentas a manos de criminales a 666 en todo el país, según datos proporcionados por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
La provincia de Limón ha sido particularmente afectada por esta ola de violencia. Con este último crimen, Limón alcanzó un total de 163 asesinatos en lo que va del año, quedando apenas un homicidio por detrás de la capital, San José. Con estos números, Limón alcanza una tasa de homicidios de 33 por cada 100.000 habitantes y casi triplica la tasa nacional de 12,6.
El cantón central de Limón completaba casi tres semanas sin homicidios, hasta este martes. El anterior suceso ocurrió el 7 de setiembre en vía pública, en Limoncito, donde asesinaron de múltiples balazos en tórax y abdomen a Omar Meza Duarte, de 48 años, de origen nicaragüense.
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Cuatro vendedores de ollas fueron asesinados el pasado 11 de julio en Nosara, Guanacaste Foto: suministrada por Keyna Calderón.
Segundo homicidio cuádruple
Este hecho es el segundo homicidio cuádruple del año. El primero ocurrió el pasado 11 de julio en Nosara, Guanacaste. En ese momento a los fallecidos los identificaron como Ronald Delgado Víquez, de 43 años; su hijo Janiel Delgado Alvarado, de 21; un menor de 17 años, primo del joven; y otro aún no es identificado.
Todos ellos trabajaban como vendedores de ollas. Estas víctimas iban en el vehículo y en determinado momento unos pistoleros los interceptaron, sin embargo, las víctimas sobrevivieron y huyeron a toda velocidad. No obstante, los sicarios continuaron el seguimiento de las cuatro personas hasta ultimarlas.
Los sicarios huyeron en moto, la dejaron a unos kilómetros y abordaron otro vehículo para esquivar a la policía.
Un mes después, efectivos del OIJ y la Fuerza Pública capturaron a un sospechoso de participar en el asesinato de estos vendedores de ollas.