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Un pistolero que irrumpió de manera violenta en una vivienda en el precario Los Huevitos, en Alajuela, asesinó de siete balazos a un hombre.
En la balacera también resultó herido un menor de 15 años. Recibió un balazo en un glúteo y fue llevado de manera inmediata en un carro particular al Hospital San Rafael de Alajuela.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) informó de que el fallecido no está identificado. Vecinos solamente lo conocen como Cristian y tiene unos 30 años de edad.
La víctima presentaba los impactos en diferentes partes del cuerpo, sobre todo en la cabeza y la espalda. En el sitio se recolectaron indicios balísticos de diferentes tipos de armas, comunicó la Policía Judicial.
El precario Los Huevitos, ubicado al costado sur del aeropuerto Internacional Juan Santamaría, en Río Segundo de Alajuela, en meses pasados también ha sido escenario de hechos violentos.
El 16 de octubre del año anterior varios individuos llegaron frente a una de las viviendas y comenzaron a disparar. El OIJ informó de que en el sitio se encontraron aproximadamente 10 indicios balísticos de armas nueve milímetros y 7.62. Estas últimas regularmente se disparan con un fusil de asalto como una AK-47.
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En el ataque murió Rogers Francisco Calderón Rizo, de 26 años. Resultaron heridas su compañera sentimental, Melva del Socorro Mercado, de 44 años, y Dexinia María Leyton, de 22 años.
El precario Los Huevitos, que al inicio también fue conocido como precario finca Carrillo, tuvo su origen en 1990. En un censo que hizo el Instituto Nacional de Vivienda y Urbanismo (INVU) en el 2013, se determinó que habían 45 viviendas, habitadas por 572 personas.
Otro homicidio
Paralelamente, el OIJ informó de que en Los Almendros, en Barranca de Puntarenas, asesinaron a balazos a Jognnan Steven Centeno Hernández, de 26 años. El homicidio se produjo en una alameda el martes poco después de las 7 p. m. y cerca de la vivienda del fallecido.
El cuerpo presentaba al menos tres impactos de bala, uno en el pecho, otro en la cabeza y en la espalda.
Vecinos dijeron a las autoridades que escucharon varias detonaciones y cuando salieron a la calle observaron un cuerpo en vía pública. Aún con vida, lo llevaron al Hospital Monseñor Sanabria, donde murió poco tiempo después de su ingreso.
Agentes judiciales realizaron el levantamiento del cuerpo que fue trasladado a la Medicatura Forense en San Joaquín de Flores, Heredia, para realizar la respectiva autopsia. El móvil del asesinato se desconoce.
