En cualquier otro momento la noticia de la salida de Tom Brady de los New England Patriots y su inminente firma con los Tampa Bay Buccaneers hubiera si lo más importante en el mundo deportivo.
No obstante, la pandemia por el covid-19 hace que la noticia más importante de la NFL en años no tenga el impacto normal.
Esto es como si Lionel Messi anunciara que deja el FC Barcelona después de solo haber vestido esa camiseta en su carrera o como cuando MIchael Jordan reveló que jugaría con los Washington Wizards después de haberlo hecho siempre con los Chicago Bulls.
De hecho, Brady es considerado el mejor mariscal de campo en toda la historia de la NFL y sus seis anillos de ganador del Super Bowl respaldan esta teoría.
En la NFL esta semana se abrió la agencia libre, la cual permite a los equipos negociar con los jugadores para temporada que se inicia a finales de este año.
“La agencia libre ha llegado a liberar un poco al fanático desesperado de deportes, estamos recibiendo noticias. La noticia fue un shock completo desde que no seguía en los Patriots hasta que se anunció que iba a Tampa. Lo que viene en los siguientes días si será más complicado, la firma de contratos y mover algunas fechas de se tenían”, explicó Alonzo Solano, director de NFL Latino.
Brady aún no será presentado con la indumentaria de su nuevo equipo, no realizará una conferencia de prensa ni se tomarán las medidas normales de un fichaje tan importante.
El mariscal de campo de 42 años llega a un equipo de poca tradición ganadora, ya que solo cuenta con una aparición en el Super Bowl, la cual se dio en el 2003, cuando vencieron a los Raiders.
Curiosamente Brady ganó su primer anillo en el 2002, un año antes que su nuevo equipo.
“Tampa Bay se vuelve uno de los favoritos para ganar el Super Bowl LV, la llegada de Brady lo hace uno de los contendientes. El Super Bowl que viene es en Tampa Bay y ningún equipo ha logrado jugarlo en su estadio, ahora tiene la oportunidad de ser el primero”, agregó Solano.
La época de Brady marcó la NFL de una manera sin precedentes, pero al final su relación con Bill Bellichick, técnico de los Patriots, no terminó con un final feliz.
“Es el punto final a una dinastía que dominó la liga por los últimos 20 años y fue la mejor dinastía en la historia de toda la NFL. Como todo tipo de separaciones termina mal, el tema de los egos terminó golpeando al jugador y al entrenador”, finalizó Solano.