EscucharCartaginés se siente cómodo en la cima del Torneo de Verano 2013 luego de completar ocho jornadas en esa envidiable posición, mientras que Alajuelense se adueñó del cuarto lugar y se metió a zona de clasificación.
Aunque los paperos han sumado dos empates en sus últimas presentaciones, el buen arranque brumoso le permite mantenerse firme en la cima, sobre todo cuando su inmediato rival, Pérez Zeledón, empató, 1-1, en su visita a San Carlos y se mantiene a cuatro puntos del cuadro de Javier Delgado.
Mientras que cartagineses e isidreños siguen sólidos en la parte alta de la tabla, Alajuelense recortó distancias y gracias a su goleada en campo santista (4-1) se adueñó del cuarto lugar. Además, recortó distancia con los líderes.
Carmelita es otro club que sigue firme luego de sacar un valioso empate ante un Herediano que permanece sin ganar bajo las órdenes de Marvin Solano. Los carmelos sumaron 11 puntos y son terceros en la clasificación, en tanto que los florenses se ubican de novenos.
Primer triunfo. Belén dejó de lado la racha de empates y derrotas al conseguir ayer su primer triunfo del certamen e imponerse, 2-0, a un aguerrido cuadro porteño que se mantiene en pie de lucha por los puestos de privilegio.
Limón, por su parte, no pudo abandonar el sótano, pese a que tuvo a Saprissa contra la pared. Los morados empataron en tiempo de reposición gracias a un autogol caribeño que aunque les evitó la derrota, no les permite respirar tranquilos, sobre todo cuando el miércoles tienen una visita de alto riesgo en Pérez Zeledón.
El 2-2 fue letal para ambos clubes, aunque Limón exhibió una mejoría radical. Sin duda el “efecto Pascall” (su presidente Carlos Pascall recuperó la libertad) empezó a generar buenas vibras en el club.
En resumen, la jornada fue muy positiva para belemitas y rojinegros, que gracias a sus triunfos lograron puntos valiosos y se aprovechan de los empates conseguidos por los restantes clubes.
La jornada nueve pinta dramática con juegos de martes a jueves y con clubes como Herediano y Saprissa, que están casi que obligados a ganar y espantar fantasmas.
