Tiempo atrás, Zoom se había convertido en la principal herramienta de trabajo desde casa para los jugadores y el cuerpo técnico de Liga Deportiva Alajuelense.
Ante el brote de la covid-19, con once jugadores diagnosticados como positivos, esta plataforma se convierte de nuevo en una aliada para los manudos, solo que la situación actual es muy distinta a las veces anteriores, porque de manera obligatoria, algunos jugadores tienen la obligación de quedarse en casa.
"En mi caso yo di negativo, pero otros muchachos no. Las veces anteriores se había manejado la plataforma para realizar fuerza, desde las cualidades y para la capacidad aeróbica como tal como no había tal restricción en cuanto a eso. Lo manejábamos en algunos casos de acuerdo a las posibilidades de los muchachos, saliendo a correr, dependiendo de la disposición de ellos”, expresó el preparador físico de la Liga, Juan Carlos Herrera, en charla con La Nación.
Afirma que esa situación hace que en este momento se tenga que ocupar un poquito más “y hasta preocupado estoy por eso”, confesó.
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“Hay algunos positivos, que tienen que estar en un cuarto por ejemplo, ya no es ni siquiera en una casa, es en un cuarto, porque están con la familia, o con alguien más. Entonces, con el aislamiento hay un poquito más de restricción, pero la única posibilidad que tenemos de la misma manera es la plataforma del Zoom, dirigiendo algunos entrenamientos y quebrándome yo la cabeza para ver cómo trabajo la mayoría de cosas posibles, para no perder tantísimo el estado de forma en este caso”.
¿Grupos? Al consultársele si ve factible trabajar en diferentes sesiones con quienes salieron positivos por la covid-19 y con los que no están infectados, respondió que quizás eso no resuelva la situación en sí.
“La sesión de este miércoles por la mañana la hicimos parejo, porque la mayoría son asintomáticos. Francamente no han tenido mucha imposibilidad, exceptuando dos muchachos, que se sentían un poquito cansados, agitados, débiles y es entendible, antes que futbolistas, somos seres humanos”, apuntó Herrera.
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Y agregó: “Indistintamente de si hago un grupo o si hago el otro, no es tanto por la intensidad, porque eso cada quien se maneja, o lo manejamos de acuerdo a, sino es más que todo en el sentido del espacio, que yo sí puedo delegar fuerza en distintas manifestaciones en un corredor o en una sala, perfectamente. No tengo problema, pero ya otras cualidades de la parte aeróbica y anaeróbica, no la voy a poder trabajar. Eso es lo que más me está ocupando y preocupando”.
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— L.D.A. (@ldacr) October 7, 2020
Sin embargo, también piensa en lo positivo y reitera que la respuesta ha sido muy favorable, porque “a excepción de dos muchachos, todos realizamos la sesión de Zoom, sin ningún problema”.
Empero, en el equipo van en el día a día y las decisiones podrían cambiar sobre la marcha, pues esta situación es nueva para todos y están investigando cómo manejarla para el bien de todos.
La duda. La gran interrogante de la Liga es vaticinar cómo volverá el equipo tras este parón. A hoy, Herrera no tiene una respuesta concreta, pues solo lo sabrá sobre la marcha, cuando el coronavirus sea un tema superado en el equipo y que los jugadores ya estén en competencia de nuevo.
“A eso me refiero con la preocupación y la ocupación, porque a la hora de no poder estimular esa cualidad, que no deja de ser importante por supuesto, más allá de que el tiempo puede ser corto, o ligeramente corto como para perderla, es lo que más me preocupa. Evidentemente no sabré cómo podemos llegar, porque hay que esperar y ver. Es distinto esta vez, no solo por esa variable, sino porque también en las veces anteriores todos estábamos sanos”, reseñó.
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Lo sucedido este miércoles, con esos dos jugadores a los que se les dio descanso, podría ocurrir de nuevo, porque es normal ante la situación.
“Dos muchachos se perdieron este entrenamiento, entonces tengo que ver cuántos entrenamientos se van a perder algunos que estén enfermos o contagiados, depende de cómo se sientan. Hay otras variables que están jugando esta vez, que igual que en la primera ocasión en la que fuimos a cuarentena, no tengo la experiencia del caso”, citó.
Por eso insiste en que le resulta complicado referirse al tema con exactitud al tema, porque no sabe qué pasará en estos días y cómo irán evolucionando los futbolistas, “pero lo que nosotros buscamos es estar activos lo máximo posible, bien hidratados, bien cuidados desde la parte nutricional y trabajar lo que se pueda desde el Zoom. Luego ya veremos en los primeros entrenamientos”.
Herrera insiste en que esta cuarentena de Alajuelense es muy distinta a la de las dos ocasiones anteriores.
“Si hubiese sido igual que antes, pues usted vio que la Liga no tuvo mucha diferencia cuando regresó en las dos ocasiones que estuvimos trabajando por Zoom, pero me parece que ahora será un poco distinto, más de ocuparse en alguna cosita y de mucha inteligencia de nuestra parte en muchas cosas como cuerpo técnico”.
Lo que viene. En cuanto al calendario, por el momento en el que se dio el brote, solo hubo que reprogramar un partido, que es el duelo contra Pérez Zeledón que en principio estaba para el domingo, pero que ahora se llevará a cabo el 25 de octubre.
Antes de eso, Alajuelense sostendrá su pulso a un solo juego contra el Cibao de República Dominicana, en la ronda previa de la Liga Concacaf, un partido programado para el 21 de octubre, pero que ante la emergencia, los rojinegros solicitaron pasarlo para el 22 y aún están pendientes de la respuesta.
“Tenemos eso a favor, que nos perdamos solo un partido es buenísimo, pero está la parte que sigue, que nos vamos a montar en una seguidilla de juegos, terminando el mes, porque viene Cibao, Pérez, Jicaral, Saprissa, son una seguidilla importante, más allá que no deja de ser bueno que no se tengan que reprogramar tantos juegos”, destacó Herrera.
Esa cadena de partidos consecutivos ya estaba prevista desde antes, solo que los erizos no contemplaban que tendrían que hacer cuarentena con una cantidad considerable de jugadores con el virus respiratorio; aunque sí todos eran conscientes de que la situación se podía presentar en cualquier momento y debían estar preparados.
“Por calendario ya teníamos esa seguidilla de partidos prevista, ya estaba planificada para algunas cositas que quería hacer Andrés (Carevic) y ahora tenemos que ver cómo llegamos en todo sentido, no solo la parte física, deportiva como tal, sino física en cuanto a salud y a partir de ahí ver qué tenemos que hacer, porque tenemos que ser muy minuciosos en muchísimas cosas para sacarle provecho a los muchachos en cada juego, en usar inteligentemente algunas situaciones individuales para no perjudicar al futbolista y al humano como tal”, finalizó Herrera.
¿Qué pasó en el Morera Soto? |
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Antes de que la covid-19 golpeara a la plantilla deportiva de Alajuelense, el coronavirus ya se había manifestado en la otra sede del club. Fue en el Estadio Alejandro Morera Soto donde se presentaron los primeros casos sospechosos y positivos, entre funcionarios que no tenían contacto con los jugadores, ni con el personal que labora en el Centro de Alto Rendimiento en Turrúcares. Este miércoles, el estadio estuvo cerrado. Ante una consulta de ‘La Nación’, el Ministerio de Salud respondió: “Lo que se les solicitó fue la sanitización del área administrativa, lo cual conlleva un cierre de 24 horas”. Eso significa que el reducto retomará su actividad este jueves y que el viernes podrá realizarse ahí el último juego de la fase clasificatoria del Torneo 2020 del fútbol femenino entre la Liga y Sporting FC. |