Etiquetas desencanto político


Se muere la tía. La villana de este culebrón. Hoy cumple seis semanas en coma, y ojalá descanse. Que pase a mejor a vida, y con ella sus embustes y sus timos. Hay que dejar que se vaya. Angustiada, confundida, venida a menos. Solo sabía hacer las cosas a su manera, y sus maneras ya no las soporta nadie.


¿Reacción transitoria ante un gobierno deficiente o un mal estructural de la sociedad? De cualquier manera, el desencanto de los costarricenses hacia la política preocupa a los líderes de los partidos mayoritarios.