El policía ramonense Mainor Mora Chavarría pasa gran parte del tiempo en el Hospital Nacional de Niños cuidando a su hija Naomi, que recibe tratamiento contra el cáncer. La CCSS no da incapacidades a los padres en la situación de Mainor, con niños gravemente enfermos. Solo emite licencias para quienes cuidan a pacientes en estado terminal. Según el Hospital de Niños, casi 400 padres de familia al año podrían necesitar una licencia especial para cuidar a sus pequeños y no poner en riesgo su trabajo.
Más de 1.600 papás de menores gravemente enfermos se han acogido a la licencia que da la Caja para cuidar a sus hijos.
Ese beneficio entró a regir en julio de 2016. Desde entonces, un total de 1.637 cuidadores lo han solicitado.
La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) ha cancelado ¢850 millones por ese concepto, según informó la institución en un boletín de prensa.
Liza Vásquez Umaña, coordinadora de la Comisión Central Evaluadora de Incapacidades y Licencias de la Caja, explicó que se otorgan dos licencias.
Una, permite el acompañamiento a los menores gravemente enfermos que estén en riesgo de muerte. La otra, facilita el cuido durante la convalecencia después de tratamientos médicos como quimio o radioterapia, o una operación.
Estos permisos son administrados por la institución y son financiados por el Fondo de Asignaciones Familiares (Fodesaf).
Este beneficio se aprobó en la Asamblea Legislativa cuando los diputados dieron su aval al proyecto Ley para Garantizar el Interés Superior del Niño, Niña y Adolescente en el Cuidado de la Persona Menor de Edad Gravemente Enferma, impulsado por el diputado de Restauración Nacional, Fabricio Alvarado.
Antes de la n ormativa, los cuidadores de menores enfermos solo podían solicitar la licencia para casos terminales o acudir a artilugios para que sus patronos no los despidieran mientras cuidaban a sus hijos.
1. Una recomendación del médico tratante, quien debe indicar la necesidad del acompañamiento.
2. Las licencias deben ser solicitadas en el área de salud de la comunidad donde vive el paciente.
3. El cuidador debe haber cotizado al seguro de Enfermedad y Maternidad al menos tres meses antes del otorgamiento de la licencia.
Se calcula que unos 400 padres de familia al año podrían necesitar una licencia especial para cuidar a sus pequeños y no poner en riesgo su trabajo.
Este beneficio se da por un periodo de hasta tres meses prorrogables a tres meses más, informó la CCSS.
El subsidio lo paga la CCSS y no representa ninguna erogación por parte del patrono, ya que se interpreta como un permiso sin goce de salario.
El monto es proporcional al salario: si la persona tiene un salario equivalente a dos salarios base o menos, la CCSS reconoce un subsidio igual al salario.
Si el salario es equivalente a dos o tres salarios base el subsidio equivale al 80%, y si la persona tiene un ingreso mensual mayor a tres salarios bases, el subsidio es del 60% durante el tiempo en el que se prolongue la licencia.
Ingresó a La Nación en 1993. Cubre salud. Graduada de la UCR, máster de la Universidad Complutense, con formación en CDC y NIH, entre otros. Redactora del Año de La Nación 1998, premio SIP 1997, Premio Nacional de Periodismo de Salud OPS 2002, Premio Cámara Costarricense de la Salud 2022. Coautora de Comunicación, palanca para la acción en salud.
En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.