Emiratos Árabes Unidos (EAU) considera a Costa Rica como su puerta de entrada a Centroamérica; además, EAU observa un importante potencial para que el país siga su ejemplo y se convierta en un centro logístico para la región, por lo que analizan posibles inversiones en puertos y aeropuertos costarricenses. Así lo destacó la embajadora emiratí en Costa Rica, Rawdha Al Otaiba, durante una entrevista con La Nación.
“El sector de infraestructura es muy importante y Emiratos Árabes Unidos tiene una muy buena experiencia manejando puertos y aeropuertos; hemos ganado una buena experiencia en los últimos 43 años. Estamos manejando 75 puertos a nivel mundial, así que tenemos la experiencia y el conocimiento. Estamos explorando el potencial aquí en Costa Rica”, expresó la diplomática.
Al Otaiba califica de joven, pero desarrollado, el vínculo de 14 años entre su gobierno y el de Costa Rica, único país de Centroamérica que alberga una embajada emiratí. “Es una relación en crecimiento”, añadió.
Un ejemplo de esta evolución, según la embajadora, es que el principal producto de comercio bilateral antes eran las frutas, pero ahora se quiere dar un giro a un intercambio más tecnificado, en campos como los dispositivos médicos, los microprocesadores y el intercambio de talento humano en campos tecnológicos.
“Costa Rica se convirtió en un hub para este tipo de tecnología y esta es un área que nos encantaría explorar”, mencionó Al Otaiba.
Ambos países también culminaron en enero pasado las negociaciones para un Acuerdo de Asociación Económica Integral sobre Comercio e Inversión (CEPA), que brindaría a los exportadores locales acceso preferencial a un mercado con 10 millones de consumidores de alto poder adquisitivo, cuyo ingreso per cápita aproximado alcanzó los $51.000 en el 2022.
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Otras actividades que llaman la atención de los inversionistas emiratís son la hotelería y los restaurantes. Igualmente, es de interés para el país árabe conocer más sobre la experiencia de Costa Rica en los campos de la agricultura y el manejo del recurso hídrico.
“Podemos aprender de Costa Rica sobre la protección del medioambiente, del sector agrícola, sobre manejo del recurso hídrico, porque tenemos muchos retos en el manejo del agua, al ser un país muy seco con un entorno muy duro”.
“Así que, cualquier tecnología para el manejo de agua y para el sector agrícola, nos encantaría entenderla más”, explicó la diplomática, quien inició labores en el país en diciembre del 2022.
Ella es la segunda persona en liderar la embajada emiratí en Costa Rica, desde que ambas naciones abrieron sus respectivas legaciones en el 2017.
Derechos humanos y medioambiente
La embajadora Al Otaiba reconoce que su país también se puede beneficiar de entender y aprender sobre las políticas costarricenses en materia de respeto de derechos humanos y protección del medio ambiente, a raíz de los señalamientos que ha recibido su nación por parte de organizaciones internacionales como Human Rights Watch y Amnistía Internacional, en estos dos campos.
Las críticas tomaron mayor relevancia a finales de 2023, debido a que Emiratos Árabes Unidos albergó, en Dubái, la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2023 (COP28). Las organizaciones criticaron que se escogiera a EAU como país sede para las negociaciones climáticas, debido a las limitaciones en materia de libertad de expresión y de protesta.
“Muchos activistas climáticos que viajan a la COP28 están sumamente preocupados por su propia seguridad en un país anfitrión que ha encarcelado a personas por sus publicaciones en redes sociales y que hace que, en la práctica, las protestas sean ilegales”, expresó Richard Pearshouse, director de Medioambiente de Human Rights Watch.
Igualmente, se cuestionó que un país con amplio poderío petrolero albergara un evento que procura la eliminación gradual de los combustibles fósiles
El papel de las mujeres: ‘Sabemos que hay un prejuicio’
Respecto al rol de la mujer en la sociedad emiratí, la embajadora asegura que, a nivel internacional, existen preconcepciones erradas sobre los derechos que la población femenina tiene en su país, lo que genera que algunas personas incluso se sorprendan de que ella misma pueda desempeñarse como representante diplomática.
“Sabemos que hay un prejuicio, lo vinculan con la religión. Cuando la gente, por ejemplo, me ve con el cabello cubierto y con mi vestimenta tradicional, piensa que no tengo el derecho de hacer muchas cosas, lo cual no es cierto. Esto es simplemente un traje tradicional que nos gusta usar”, afirmó.
Al Otaiba asegura que su país cuenta con una sociedad muy abierta, que garantiza igualdad de oportunidades para hombres y mujeres, por medio de la educación y el establecimiento de cuotas de representación, en órganos políticos y del sector privado.
“Podemos compartir nuestra experiencia en el empoderamiento de la mujer. Tenemos una muy buena política, de la cual creo que ambos países se pueden beneficiar”, indicó.
Indicó que, por ley, el 50% del parlamento emiratí debe estar integrado por mujeres, y que existe una participación importante de la población femenina en la integración de juntas directivas. Asimismo, mencionó que una tercera parte de los ministros son mujeres, “pero no por un tema de cuotas, sino que están ahí porque están educadas y están calificadas”.
“Para nosotros no es tanto un tema de políticas, sino de educación. Nuestra inversión en educar a las mujeres es lo que jugó un rol importante. Creo que esto es en lo que debemos enfocarnos, en cómo educar a las mujeres, para que ocupen las mejores posiciones”, explicó.
La embajadora asegura que está tratando de cambiar estas “percepciones erradas”, explicando y hablando sobre ellas, así como motivando a las personas a visitar su país.
“Sé que en algunos países de la región aún hay personas luchando por sus derechos, pero las personas nos ven como un solo bloque, y no es así. América Latina no es un solo bloque, los países árabes tampoco son un solo bloque.
“Por eso hay que entender las diferencias entre cada país, el desarrollo individual y no vincularlos juntos y ponerlos en una sola caja”, argumentó.