“Es un irrespeto a la Fuerza Pública, a los más de 120 policías heridos y a la democracia misma, decir que fue una firma espuria la que levantó los bloqueos, cuando la realidad es que fue la acción hecha por las autoridades, unas mediante el diálogo y en otras por la acción policial y hay basta evidencia publica de ello”.
Así se refirió el presidente de la República, Carlos Alvarado, al acuerdo suscrito entre la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado (Uccaep) y el exdiputado Célimo Guido, del autodenominado Rescate Nacional.
Según Álvaro Jenkins, presidente de Uccaep, ese acuerdo permitió levantar los bloqueos instalados desde el 30 de setiembre por ese movimiento, pero Guido este viernes lo negó. El exdiputado aseveró que el grupo había decidido dar una tregua desde el fin de semana anterior.
El primer acercamiento lo sostuvieron el miércoles, una reunión de cinco horas cerca de Ciudad Quesada, y el jueves se volvieron a encontrar, en San José, donde firmaron una tregua, según dijo esta mañana el dirigente empresarial al programa Nuestra Voz de la periodista Amelia Rueda .
La tarde de ayer jueves, Uccaep comunicó que se negaba a participar del diálogo multisectorial convocado por el Gobierno, del cual sería facilitador el Programa Estado de la Nación.
Este mediodía, en un mensaje divulgado al país, el mandatario criticó ese pacto y señaló que “hay voces muy minoritarias, pero peligrosas, que están llamando a generar inestabilidad”.
Añadió que esas voces “no prevalecerán” y reiteró que la democracia y la institucionalidad son el camino.
“Lo grave hoy es que una organización empresarial legitimó a ese actor. Al hacer eso, le dio la espalda a la democracia. Lo que ha ocurrido es una mancha a la democracia de Costa Rica y que debemos subsanar en medio de una crisis sanitaria y ahora económica”.
“Hago un llamado a todos los ciudadanos, a los presidentes de los poderes de la República, a los expresidentes de la República, a los partidos políticos demócratas, a los actores democráticos, a los sectores sindicales, cooperativos, a las iglesias, a los solidaristas, a las mujeres, a la juventud, a los agricultores, a los empresarios que respalden la democracia a que cerremos filas con la institucionalidad y con Costa Rica”, pidió el mandatario en su mensaje divulgado al país.
Posteriormente, reiteró su convocatoria al diálogo. Mencionó que los diálogos regionales anunciados por su gobierno, este miércoles, continuarán, así como el esfuerzo de conversación multisectorial abierto por él y el presidente legislativo, Eduardo Cruickshank.
“Adaptaremos la conformación con los sectores, dialogaremos con todos los actores legítimos y que respalden la vía democrática. Lo haremos multisectorialmente, escuchando también iniciativas como la Asamblea de Trabajadores del Banco Popular y las iniciativas territoriales en los diálogos que el Gobierno lleva en marcha y que reanudarán mañana".
A su vez, la Red Nacional de Agentes de Desarrollo Económico Local (RENADEL), que agrupa a agencias de desarrollo local de nueve territorios del país, reiteró su compromiso por retomar el diálogo.
Alvarado continuó: “Así, alejaremos a nuestro país del abismo económico al que nos ha cercado la covid-19, pero he sido claro,. A corto plazo, debemos tener una propuesta en materia de finanzas publicas para evitar una grave crisis económica y social. Saldremos adelante, pero distingamos quienes defienden la paz y la democracia y quienes no. Gracias de nuevo por las oraciones, por nosotros, pero principalmente las oraciones por Costa Rica”.
Minutos después del mensaje del presidente, Uccaep indicó en un comunicado de prensa que “actuó de forma diligente al lograr un acercamiento con el Movimiento de Rescate Nacional que permitió levantar los bloqueos que afectaban las carreteras del país, e iniciar un diálogo de acción inmediata que permita generar consensos para solventar la crisis económica y social que afecta a Costa Rica".
“Para la organización, el acuerdo de levantar los bloqueos, en primera instancia, beneficia el empleo de miles de personas que se veían afectadas todos los días para llegar a sus centros de trabajo, en momentos en que el país enfrenta cifras de desempleo que afectan a más de 500.000 costarricenses (23,2 %)”, reza parte del comunicado.
Por su parte, Jenkins aseveró aseveró en un video divulgado por la Unión de Cámaras, que las conversaciones se desarrollaron como una alternativa para levantar bloqueos.
"Por ende requería de acciones extraordinarias para garantizar el ambiente de paz social necesario para no seguir afectando el empleo y la movilidad de toda la población” aseguró.
¿Cómo se fraguó el pacto?
Sobre quién inició el acercamiento hay dos versiones.
Minutos después de las 9 a.m. de hoy, luego de salir de los Tribunales de Justicia de San José, donde acudió tras ser citado por la Fiscalía que lo acusa por los delitos de instigación pública, entorpecimiento de servicios públicos y obstrucción de vía, Célimo Guido aseveró que fue la Uccaep la que buscó el acercamiento.
“La Uccaep para que conversáramos y conversamos. Y no es ningún delito y, mire, en el pasado, ¿cómo se explican ustedes que cuando el país estaba en crisis que se unieran el Partido Comunista con la Iglesia Católica? Eso era simplemente inaceptable, supuestamente”, respondió Guido a la consulta.
Sin embargo, cerca de dos horas antes, en el programa radial Nuestra Voz, de radio Monumental, Jenkins había dado su versión de los hechos.
Aseveró que un amigo suyo, la noche del martes, le llamó indicando que el exdiputado quería conversar con él, luego de que un día antes había firmado la apertura de un diálogo entre 51 organizaciones, convocada por la Asamblea de Trabajadores del Banco Popular.
Jenkins: ‘Lo que no había hecho el Gobierno en dos semanas, logré hacerlo en cinco horas’
Este fue el relato que el empresario dio en ese programa:
"El martes por la noche recibo una llamada en mi casa como a las 9 de un amigo, diciéndome que Célimo Guido y su gente quieren hablar conmigo. Entonces, a mi amigo le digo, ‘¿estás seguro?, ¿me estás hablando en broma?’ me dice, ‘no,no, mirá, es en serio’.
"Y le digo y '¿por qué yo? ‘Mirá, es que con la firma este del diálogo alguien que participó lo llamó (a Guido) y dijo que José Álvaro Jenkins era una persona con la cual se podría hablar y que era muy razonable su planteamiento y, entonces, quieren hablar con usted’.
"Entonces, le dije 'déjeme media hora para razonar un poquito, esto es medio serio y déjeme llamar en media hora. Yo estaba con mi esposa comiendo y, bueno, empezando a hablar del tema más bien se puso toda nerviosa, ‘mirá, qué peligroso, esto y el otro, ahí te pueden secuestrar’ y miles de conjetura que se hacen pero al final, en la posición que uno está, lo más fácil era decir que no, no voy, no pasa nada y estaríamos hoy con bloqueos otra vez en San Carlos, en la 32 y en todo lado y ahora le cuento por qué.
“Después de meditarlo un poco, cuando me volvió a llamar mi amigo le digo 'mire, sí, está bien, dígale que sí, que yo voy mañana a reunirme con él, en un lugar ahí como neutral, me dijo donde llegar.
"A las seis de la mañana salí de la casa, con una velita prendida de mi esposa para que no pasara nada y me fui a San Carlos, cerca de Ciudad Quesada a hablar con él y, cuando entré, estaba don Célimo y la sorpresa que me llevé es que la mayoría que la gente que lo rodeaba era de entre 26 a 34 años, realmente era gente relativamente joven y, diay, me senté con ellos a hablar y a dialogar a ver qué querían.”
"Después de escuchar una serie de quejas muy grande al final les dije '¿qué ganan bloqueando? Al final ustedes están haciendo un gran daño al país, se están afectando ustedes mismos. En fin, andaban buscando una fuente de salida para ver cómo salían ellos de eso. Ellos no querían realmente hacer más bloqueos, pero ya estaban metidos en esa actividad y no hallaban como salirse.
"Y les dije ‘mire, lo más fácil es que, me parece a mí, que hagan una tregua. El presidente les dijo que si ustedes levantaban el bloqueo, él los recibía. Además, no es solo el Poder Ejecutivo, ustedes pueden hablar también con diputados si los recibían’. Compraron la idea.
“Ahí mismo, me llamó la atención, uno de ellos cogió el teléfono porque al día siguiente, o sea, ayer (jueves), tenían planeado hacer cinco bloqueos. Ahí mismo llamaron a la gente, no sé a quién llamaron, pero hicieron conexiones diciendo ‘miren, paren los bloqueos, vamos mañana para San José, vamos a anunciar una tregua y le vamos a pedir el presidente que nos reciba’”.
“Yo me vine de vuelta tranquilo. Por lo menos digo, lo que no había hecho el Gobierno en dos semanas, logré tratar de hacerlo en una conversación de cinco horas que estuve con ellos”.