El arma que un estudiante del Liceo Monseñor Rubén Odio, de Desamparados, usó para apuntar a sus compañeros dentro del centro educativo, resultó ser de juguete, confirmó el Ministerio de Educación Pública (MEP) este martes.
La escena fue grabada en un video y puesta en redes sociales desde abril. La situación obligó al colegio a activar un protocolo de seguridad en caso de uso de armas de fuego, según trascendió el lunes.
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Kattia Grosser, directora de Vida Estudiantil del MEP, explicó que el joven encontró el arma guardada en el escritorio de un profesor, quien la había decomisado el año pasado a otro estudiante.
El docente no reportó el hallazgo por considerar que no representaba peligro por ser de juguete.
“El arma la encontraron los chicos en el escritorio de un profesor, era de juguete. El profesor dice que él la había decomisado el año pasado pero como era de juguete no la reportó. No debería hacerse seguimiento en este caso contra los estudiantes, porque era de juguete y no estaban poniendo en riesgo la vida nadie”, consideró Grosser.
La funcionaria explicó que van a aprovechar este incidente para hacer conciencia en los estudiantes de que si encuentran un arma reporten el hecho al personal del centro educativo y no la toquen, pues no tienen certeza de si es o no real.
“Inicialmente, lo que vamos a hacer es restablecer la seguridad en el centro educativo, hablar con los involucrados y no involucrados y tomar las medidas necesarias para hacer conciencia de que si encuentran un arma, no la toquen”, manifestó Grosser.
Según explicó la funcionaria, el director remitió el caso a la Fiscalía debido a que el arma no aparece.
Este caso trasciende un mes después de que se conociera el caso de un un joven que en redes sociales amenazó con realizar un tiroteo en el Colegio de San Luis Gonzaga, en Cartago.
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La situación obligó a que el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y la Fiscalía de Cartago intervinieran para dar con el supuesto responsable.
Actualmente, un alumno de 14 años encara una causa judicial por los delitos de intimidación pública y apología del delito. Aunque el Juzgado Penal no le impuso medidas cautelares, el centro educativo decidió separarlo temporalmente mientras se decide su situación.