EscucharBerlín. Las autoridades alemanas anunciaron el miércoles haber desbaratado un atentado con “bomba biológica” tras la reciente detención de un tunecino, un proyecto sin precedentes en Alemania, país que, sin embargo, está bajo la amenaza de ataques yihadistas.
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un asistente de investigación muestra semillas de la planta de aceite de ricino (Ricinus communis) que contiene ricina venenosa frente a un terreno donde crecen las plantas en el Jardín Botánico de la Universidad Ruhr Universitaet en Bochum, Alemania. (BERND THISSEN/AFP)
“Ha habido en este caso preparativos concretos para llevar a cabo este acto, con una especie de bomba biológica. Se trata de algo sin precedentes en Alemania”, declaró el jefe de la policía criminal alemana, Holger Münch, en la radio regional RBB.
Las investigaciones apuntan a vínculos del sospechoso con el grupo Estado Islámico (EI), indicó Munch, sin más precisiones.
El hombre, de 29 años, presentado bajo el nombre de Seif Allah H., había sido detectado “algunos meses” antes por las autoridades, era objeto de vigilancia, y habría frecuentado medios islamistas en su país de origen.
Los preparativos con vistas a un ataque estaban en curso hasta que el individuo fue detenido el martes pasado, según las autoridades.
Veneno vegetal
“Los registros muestran que el sospechoso ya había producido ricina” el veneno vegetal más violento conocido hasta ahora, informó el jefe de la Policía.
Esta sustancia es unas 6.000 veces más potente que el cianuro. Se trata de una sustancia mortal en caso de ingestión, inhalación o inyección, y contra el cual no existe antídoto.
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La semana pasada, al ser detenido en Colonia el tunecino por las fuerzas de élite de la policía alemana, se indicó que en su apartamento se había descubierto una sustancia muy tóxica, la ricina.
Es la primera vez que las autoridades afirman claramente que estaba preparándose un atentado con bomba de ricina.
“Hemos hallado gran número de granos de ricina, que permiten producir” el veneno, dijo Münch, “y también los utensilios necesarios para la fabricación de un explosivo”. Según la fiscalía antiterrorista, cerca de una millar de granos han sido incautados en total.
Se ignora aún el objetivo del atentado, así como la existencia de eventuales cómplices del sospechoso.
El jefe de los servicios de inteligencia interior, Hans-Georg Maassen, explicó que la detención fue posible gracias a la colaboración de “servicios de seguridad nacionales e internacionales”.
Según la prensa alemana, fue la CIA de Estados Unidos la primera en alertar a la Policía alemana, tras haber detectado por Internet compras, por parte del sospechoso, de sustancias que pueden servir para fabricar una bomba.
Amenaza en Francia
En mayo pasado, las autoridades francesas anunciaron haber desbaratado un atentado con explosivos o con ricina previsto en París. Un egipcio de 20 años fue detenido y encarcelado.
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Alemania ha sufrido varios atentados en los últimos años. El más grave de ellos se produjo en diciembre de 2016, y fue cometido por un tunecino de 23 años, Anis Amri, autor de un atentado con camión en un mercado navideño en Berlín, que causó 12 muertos y fue reivindicado por el EI.
El debilitamiento del EI, que ha sufrido claros reveses militares en Siria e Irak, hace más improbable la repetición de atentados como los de Paris el 13 de noviembre de 2015 o Bruselas el 22 de marzo de 2016, según las autoridades.
“No los consideramos (estos atentados) completamente improbables, pero sí menos probables pues el EI está muy debilitado”, afirmó Holger Münch.
Sin embargo, “tenemos un elevado número de personas radicalizadas, y hay que vigilarlas”, agregó.
