El sector industrial formal del país espera que en el 2014 su generación de empleo termine “empatada”. Es decir, no se crearán ni más ni menos puestos de trabajo que en el presente.
Así lo concluye Pedro Morales, asesor económico de la Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR) a partir de una encuesta realizada entre 200 empresas del sector industrial del país.
Según el estudio, ejecutado por la misma Cámara, el 70% de las empresas no espera generar ni más ni menos empleos en lo que queda del 2014; mientras, el 20% espera generar más. Por su parte, el 10% espera una disminución en sus contrataciones.
Por lo anterior, el balance neto que hace Morales es que no se generen empleos este año en el sector industrial.
Esas percepciones varían según el tamaño de la empresa. Por ejemplo, en las grandes compañías, el 12,9% espera una reducción en el empleo; mientras que en las pequeñas y medianas esa expectativa se registra solamente entre el 8%.
La industria manufacturera acumula el 17% de la población ocupada del país, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos.
Esta percepción negativa la comparte el sector comercial. Según el índice de confianza de marzo, que preparó la Cámara de Comercio, la generación de empleo registra grandes preocupaciones.
De hecho, según datos de enero del 2014, se eliminaron 1.852 puestos de trabajo en el sector comercial, de acuerdo con la Caja Costarricense del Seguro Social.
Medido por ocupación, tal sector es más amplio que el industrial. El comercio y los servicios acumulan el 70% de los ocupados.
Competitividad. La CICR utilizó los resultados para enfatizar en los problemas de competitividad del sector. El factor que más los afecta, según el estudio, es el costo de la energía. Luego, el tipo de cambio creciente y el costo de las materias primas.
Juan Ramón Rivera, presidente del gremio, solicitó una reingeniería en el Instituto Costarricense de Electricidad para bajar sus cargas financieras, y así, según él, provocar una baja inmediata en el precio de la energía.
También aboga para que se elimine el impuesto a los combustibles utilizados para generar energía, y para que se permita mayor participación del sector privado en la generación eléctrica.