San José.
Durante el 2016, la venta de motocicletas creció a un menor ritmo que en años anteriores; tampoco se cumplió la expectativa de ventas, de acuerdo con información brindada por la Asociación de Importadores de Motocicletas (AIMA)
El crecimiento el año pasado fue de casi 19% respecto al 2015, con un total de 67.736 unidades registradas según los datos que posee esta agrupación; en el 2015, por ejemplo, el crecimiento fue de casi 23%.
La meta de ventas para el 2016 era de 75.000 unidades, según la proyección de la misma organización a mitad del año pasado. Pese a que no se alcanzó el objetivo se vendieron 10.700 motocicletas más que en el periodo anterior.
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Gilberth Porras, presidente de AIMA, aseguró que el ritmo de crecimiento se redujo durante el segundo semestre.
"El mercado venía creciendo a un ritmo del 25% anual durante cuatro años y era de esperarse que en algún momento iniciáramos un descenso y se está empezando a manifestar a partir del año anterior", señaló el representante.
A este ritmo, es probable que para el 2017 el crecimiento sea menor o más bien haya un resultado negativo, según Porras. "Esto producto de la situación interna del país y los cambios políticos y económicos de nuestros principales socios comerciales y el mundo en general", indicó.
La venta de motocicletas contribuye con más de ¢150.000 millones al año en impuestos arancelarios, impuesto de ventas, renta, cargas sociales e impuestos indirectos, según datos de la misma organización.
Solo con la importación, el Ministerio de Hacienda recauda unos ¢12.000 millones por año.
Además, el sector da empleo a unas 2.000 personas de forma directa y favorece 10.000 empleos indirectos.
Composición de mercado
Las marcas Freedom, Honda y Serpento son las más vendidas en Costa Rica, con 14% de participación cada una.
Serpento fue la que más creció, con un 29,5% más de unidades vendidas. Esta marca tiene cuatro años en el mercado y es propia de Grupo Monge, empresa que registra un crecimiento similar en los últimos tres años, según indicó José Joaquín Urbina, gerente de Categorías de esta tienda.
Entre las tres vendieron más de 9.000 unidades durante el 2016, muy por encima de las marcas Suzuki o Yamaha (-9% en 2016), con 4.500 y 3.800, respectivamente.
Por otro lado, algunas marcas tuvieron un mejor año y vieron un crecimiento importante. Tal es el caso de almacenes Gollo que vendieron 70% más el año pasado, impulsado principalmente por las motocicletas AKT. Para este año, prevén un crecimiento de 40%, según Eduardo Córdoba, gerente de Mercadeo de la cadena.
Según Aima, los segmentos deportivos y doble propósito mantienen su crecimiento y hay un ligero repunte en alta cilindrada por un aumento en la oferta de productos y marcas.
Las principales razones para comprar moto siguen siendo: ahorro en tiempo de traslado y dinero, facilidades de crédito, deficiente transporte público y como complemento para el trabajo.