Las condiciones de la mayoría de playas en el Pacífico costarricense serán favorables para los bañistas durante esta Semana Santa, pues no se estiman fuertes oleajes y es poco probable que se formen corrientes de resaca.
Sin embargo, aunque el anuncio es positivo, las autoridades recuerdan que nunca se debe bajar la guardia cuando de enfrentarse al mar se trata.
Omar Lizano, oceanógrafo del Centro de Investigación en Ciencias del Mar y Limnología (Cimar), de la Universidad de Costa Rica (UCR), explicó que para el Pacífico se espera que las olas alcancen alturas máximas de entre 1 y 13 metros, por lo que no habría corrientes importantes y tampoco se pronostican condiciones de vientos fuertes.
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Sin embargo, las corrientes no son el único aspecto a considerar en cuanto a la seguridad al meterse al mar, pues hay otras playas que se consideran peligrosas por tener rocas, porque no tienen salvavidas, o porque hay objetos o condiciones de relieve irregulares, que no son visibles por los bañistas a simple vista.
"Hay playas donde cuando la marea sube, uno no se da cuenta donde está la roca y dónde está la arena, siempre es recomendable preguntarle a los lugareños sobre estas condiciones", aseguró Lizano.
También se debe estar atento a otros objetos como basura o troncos que pueden golpearlo mientras se baña en el mar.
Además, siempre se considera de cuidado aquellas playas que dan hacia mar abierto, como las que se ubican en el Pacífico central, pues en estas las olas rompen con mucha fuerza o en ocasiones se forman olas muy altas.
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Caribe picado.
Mientras el Pacífico estará en calma, en el Caribe el oleaje empezará a aumentar de miércoles a viernes. Según los datos del Cimar, se esperan olas máximas de hasta 2,5 metros, que aunque no son de riesgo para los navegantes, si deben ser de cuidado para los bañistas, pues podrían generar corrientes peligrosas.
La alerta rige para todo el Caribe, sin embargo algunas playas como Moín, Puerto Viejo, Cocles, Cahuita y Uvita son de especial atención, pues también suelen ser de las más frecuentadas por los vacacionistas.
De acuerdo con datos de la Cruz Roja las playas donde se ha reportado mayor incidencia de accidentes acuáticos en los últimos años son Jacó, Caldera, Herradura, Puerto Viejo, Bahía Ballena y Esterillos.
Esa institución dio a conocer además la lista de las playas donde habrá vigilancia por parte del equipo de salvavidas: Tamarindo, Junquillal, Caldera, Jacó, Esterillos Oeste, Manuel Antonio, Dominical, Ballena, Moín, Bonita, Estero Negro y Manzanillo.
Recomendaciones.
-Si no sabe nadar, no se adentre en el mar.
-Después de cada comida, permanezca al menos 2 horas fuera del agua.
-No se bañe en estado de ebriedad o después de haber consumido algún tipo de drogas o medicamentos que afecten sus sentidos.
-No deje a sus niños solos cerca del agua.
-Si viaja en algún vehículo acuático y éste se vuelca, trate de agarrarse de inmediato del mismo y quedarse ahí hasta que llegue la ayuda.
-Verifique siempre a su llegada el lugar de vacaciones, la posición exacta donde se encuentran los salvavidas y los puestos de atención prehospitalaria más cercanos.
-Cuando observe a un salvavidas haciendo un rescate acuático, no colabore con él hasta que se lo pida y no se aglomere muy cerca de ellos.
-Las horas más seguras para exposición al sol son entre las 8 a. m. y las 10 a. m. y entre las 3 p. m. y las 5 p. m. Siempre use bloqueadores solares de acuerdo con su sensibilidad de piel.
-En caso de insolación, debilitamiento o mareos por calor, siministre un vaso con agua y ½ cucharada de sal de cocina, afloje las prendas que obstruyan la respiración y la circulación, acueste al paciente boca arriba y súbale los pies a 25 cm del suelo.
-Cuando haya tormentas eléctricas, manténgase fuera del agua, y si se encuentra en un pequeño bote, diríjase a la orilla.
