La ganadería es responsable del 30% de las emisiones nacionales de gases de efecto invernadero, el segundo rubro más importante, después del sector transporte.
El plan fue formulado por la Corporación Ganadera Nacional , la Cámara de Productores de Leche y el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) , y además, lleva el espaldarazo del Ministerio de Ambiente (Minae) .
“La ganadería, aunque es el sector que más emite (dentro de agropecuarios), es el sector que más potencial tiene para reducir y para mitigar las emisiones”, resaltó Giovanna Valverde, directora de Asuntos Internacionales del MAG.
El plan, conocido como NAMA Fincas Ganaderas, cuenta con medidas de mitigación especializadas para el sector lechero y el de producción de carne.
Con el primero, se planteará incorporar fertilizantes orgánicos y, además, incluir la boñiga en un sistema llamado fertirriego, que abona la tierra en una disolución de agua.
En el segundo, la idea es crear un sistema de cercas que permita rotar el ganado entre parcelas de un mismo potrero, para proteger el pasto. Si los animales comen mejor, pueden llegar a pesar más y a reproducirse mejor, lo que mejoraría la ganancia del ganadero, asegura el MAG.