La esperada versión filmada de El Fantasma de la Ópera llegó el viernes a las pantallas londinenses, en estreno mundial, tras haber sido vista la versión musical por decenas de millones de personas en los escenarios teatrales de Broadway y del West End.
La obra musical de Andrew Lloyd Webber, que narra la historia de un músico con el rostro desfigurado que se oculta en los sótanos de la Ópera de París y se enamora de una joven cantante.
Basada en la novela homónima de amor no correspondido, escrita por el francés Gaston Leroux en 1911, la obra musical fue estrenada en Broadway en 1986 y batió todos los récords, representándose en 18 países y recaudando más de $3.000.000.
Además, el reciente éxito de musicales que saltaron exitosamente de Broadway a Hollywood, en suntuosas versiones plásticas, como Chicago y Moulin Rouge , animó a Webber a hacer realidad el sueño que acariciaba desde hace dos décadas, de llevar su obra hasta el celuloide.
Amplio trabajo
Después de mucho bregar, y muchos millones de dólares gastados, la adaptación cinematográfica del musical de Webber tuvo su estreno mundial esta semana en un cine de Leicester Square, en el centro de Londres, con la asistencia de una lluvia de estrellas, entre ellas Minnie Driver y el músico británico Elton John.
La adaptación cinematográfica, que dura dos horas y media, fue realizada bajo la dirección de Joel Schumacher, amigo de Webber y quien es también el productor del filme, junto con el compositor, que puso como condición contar con actores muy jóvenes.
Esta cinta romántica, gótica, con toques de cine fantástico, está interpretada por el escocés Gerard Butler, que encarna al Fantasma, y Emmy Roussum, quien protagoniza a la dulce Cristina.
La banda sonora fue hecha por Webber, que reinterpretó su propia música con 110 músicos.
Los otros temas son los mismos que cautivaron al público durante años en el teatro The Music of the Night , The Phantom of the Opera , All I Ask for You .
Antes de Webber, que ha firmado obras tan exitosas como Jesucristo superstar , Evita y Cats otros realizadores se atrevieron a llevar la novela de Leroux al cine, entre ellos Arthur Lubin, en 1943, con Claude Rains, Terence Fisher, en 1962, y Brian De Palma, en 1974.