Steve Bowen y Michael Good ingresaron a la sala de descompresión de la estación a las 1:47 p. m., poniéndole fin a una expedición orbital de siete horas y nueve minutos, o sea casi 40 minutos más de lo previsto.
La expedición fue extendida para permitir a los astronautas instalar una cuarta batería además de las tres que debían inicialmente sustituir.
Se trataba de la 238 salida al espacio realizada por astronautas estadounidenses, la quinta para Bowen y la tercera para Good, según la Nasa.
El domingo, el “Atlantis” se acopló a la ISS, a la que permanecerá unido siete días y a la que llevó un cargamento de más de 12 toneladas de materiales, seis baterías para los paneles solares de la estación, víveres y materiales para experimentos científicos.
Tras este vuelo, en principio sólo quedarían dos viajes de transbordador: el del “Discovery” a mediados de septiembre y el del “Endeavour”, a fines de noviembre. Luego, los tres aparatos serán enviados al museo, coronando tres décadas de servicio que permitieron construir la estación espacial.