Nairobi. EFE. El brote de ébola en Guinea Conakri, que ha matado ya a 78 personas y se ha extendido a Liberia y Sierra Leona, constituye una “epidemia sin precedentes”, advirtió la organización humanitaria Médicos Sin Fronteras (MSF).
“Afrontamos una epidemia de una magnitud nunca vista antes en términos de distribución de casos en el país”, señaló Mariano Lugli, coordinador de MSF en Conakri.
“ La vasta propagación del brote en Guinea es preocupante porque complicará mucho la labor de las organizaciones que trabajan para controlar la epidemia”, dijo Lugli.
Hasta la fecha, las autoridades han contabilizado 122 pacientes sospechosos y 78 muertes.
La ayuda de la comunidad internacional ha permitido adoptar todas las medidas necesarias para contener el virus.
Médicos Sin Fronteras precisó ayer que el brote que azota ese país es la cepa de Zaire del virus del ébola, que representa “la forma más agresiva y letal del virus”.
De cada diez personas afectadas, esa cepa “mata a más de nueve”, según el epidemiólogo de la organización Michel Van Herp, que se encuentra actualmente en la zona de Gueckedou.
“Para detener el brote, es importante rastrear la cadena de transmisión. Todos los contactos de pacientes que han podido ser contagiados se deberían supervisar y aislar ante el primer signo de la infección ”, manifestó Van Herp.
La organización recordó que en la actualidad no existe ninguna vacuna o tratamiento exitoso establecido contra el ébola .
El virus del ébola ha golpeado cuatro poblaciones de Guinea: Gueckedou, Macenta Kissidougou, Nzerekore y Conakri.
El comunicado de MSF se publicó después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) aseguró ayer que el brote se extendió a Liberia, donde exámenes clínicos confirmaron dos casos.
En Sierra Leona, que como Liberia es fronteriza con Guinea Conakri, se identificaron dos enfermos sospechosos y en ambos casos los afectados murieron.
Senegal, otro país colindante con Guinea, ordenó ayer el cierre de sus fronteras con ese país para evitar la propagación del virus.