Uno de los jueces del caso del abogado que cultiva droga, se separó del voto de sus compañeras y consideró que el imputado sí tenía como objetivo traficar marihuana.
Se trata del juez Miguel Fernández Calvo, presidente del Tribunal Penal de Alajuela, quien manifestó que los indicios son suficientes para determinar que hay una finalidad de comercialización.
Según Fernández, llegó a esa conclusión al considerar que en los cinco allanamientos realizados a la casa de Cerdas, se le decomisaron 177 plantas.
“Se pudieron confeccionar más de 5.000 cigarrillos de marihuana con lo decomisado; no creo que ninguna persona sea capaz de fumar esa cantidad en un año”, expresó el jurista.
Asimismo, argumentó que el dictamen toxicológico indicó que Cerdas no es un consumidor crónico, ya que las pruebas de sangre dieron un resultado de presunto fumador, a pesar de que el abogado aseguró que un día antes de los exámenes, fumó dos cigarrillos.
“Si el encartado no es un consumidor habitual, ¿por qué tiene tanta cantidad de droga en casa? La única respuesta es que es para el tráfico”, añadió.
No obstante, sobre ese punto, la jueza Leitón dijo que la cantidad no tiene relación, pues consideró que una persona puede sembrar solo tres plantas y, con ellas, dedicarse a la venta.
“No es la cantidad de plantas, lo importante es que se logre establecer que ese cultivo estaba destinado al tráfico”, comentó.