Solo la revisión médica de rutina separa a Prince Fielder de ser el tercer beisbolista de la historia en pactar por más de $200 millones, junto a nombres como Albert Pujols y Alex Rodríguez.
Ayer se dio a conocer, por fuentes anónimas, que el primera base firmará por nueve años y $214 millones con los Tigres de Detroit, equipo en el que su padre, Cecil Fielder, brilló en los años 80 y 90.
Cuando se confirme el pacto, los felinos se harán de posiblemente la alineación de bateo más poderosa de las Grandes Ligas de beisbol. Prince se unirá a Miguel Cabrera, Carlos Guillén, Johnny Peralta, Brandon Inge, Magglio Ordoñez y otros maderos ardientes.
Ya sin el primera base de 27 años, los Tigres tuvieron el suficiente poder la campaña pasada para dominar la disputada División Central de la Americana, eliminar a los Yanquis en los play-off y dar pelea a los Rangers en la final de liga.
Basta recordar que Detroit también cuenta con el pitcher Justin Verlander, MVP y Cy Young de la Americana en el 2011. Haga los cálculos y sabrá que estos felinos son contendientes para Serie Mundial.
Bate poderoso. En el 2011 Prince pegó 38 jonrones e impulsó 120 carreras para llevar a los Cerveceros a una apretada lucha por el banderín de la Liga Nacional.
Con ese rendimiento el pelotero alcanzó la friolera de 230 vuelacercas en seis años como profesional (más de 40 por campaña en sus últimos cinco años). También acumula 656 carreras impulsadas, con un average de bateo de .282.
Fielder es perfecto para acomodarse en la tercera o cuarta posición de una alineación de bateo. Respecto a su posición dentro del campo es casi impensable que saque a Cabrera de la primera base, por lo que se acomodará como bateador designado, donde sustituirá a Víctor Martínez, quien podría perderse la campaña entera.
Si bien es de esperar que Fielder siga mejorando sus números, también es sabido que tiene problemas de sobrepeso y es muy difícil imaginarlo jugando a un alto nivel a sus 34 o 35 años, cuando siga devengando decenas de millones.