Los diputados de la Comisión Legislativa Plena Primera aprobaron la semana pasada, en primer debate, una reforma al Código de Familia que legaliza las uniones de hecho entre dos personas a partir de los dos años. Ahora, solo falta la aprobación en segundo debate y la firma del presidente de la República para que el ajuste entre en vigor.
Se trata de una modificación aplicada en el artículo 242, el cual actualmente exige una estabilidad de al menos tres años para que la pareja adquiera todos los efectos patrimoniales propios de un matrimonio.
El proyecto fue presentado por la socialcristiana María Vita Monge, quien argumentó que, a raíz de las múltiples evoluciones que han sufrido las uniones de hecho en el país, también debe evolucionar la ley para garantizar la respuesta a las necesidades de las personas que optan por ese vínculo civil.
“El cambio en las normas culturales ha provocado una proliferación importante en este tipo de relaciones, modificaciones en su composición e incluso duración”, enfatizó la propuesta.
“Ha sido notoria la complicación generada por el requisito de los tres años, pues una unión puede durar menos que eso y haberse constituido bajo los regímenes de la formalidad y afectividad. Un plazo de dos años es suficiente tiempo para consolidar esos vínculos”, dijo Monge.
La diputada también consideró que el nuevo plazo busca resguardar la seguridad jurídica y alejar de la indefensión a alguna de las partes afectadas cuando una relación no supera un plazo mayor a tres años.
Entre los efectos del reconocimiento de la unión de hecho, están el derecho sobre los bienes y adquiridos e, incluso, la posibilidad de aseguramiento de un miembro de la pareja a otro.
El Instituto Nacional de Estadística y Censo (INEC) contabilizó en los últimos años 8.034 parejas en unión de hecho, mientras que entre el 2014 y el 2017 se tramitaron 2.363 solicitudes de reconocimiento de uniones de hecho en juzgados de familia.
El proyecto de ley 21.245 recibió el voto afirmativo de 15 congresistas en su primer debate, mientras que dos votaron en contra y la independiente Shirley Díaz estuvo fuera de dicha votación.
Afirmativamente votaron Luis Ramón Carranza, Laura Guido, Nielsen Pérez, del Partido Acción Ciudadana (PAC); David Gourzong, Wagner Jiménez, Aida Montiel, Franggi Nicolas, Karine Niño y Roberto Thompson, de Liberación Nacional (PLN); María Vita Monge, de la Unidad Social Cristiana (PUSC); los independientes Carmen Chan, Nidia Céspedes, Harllan Hoepelman; Wálter Muñoz, de Integración Nacional (PIN), y José María Villalta, del Frente Amplio.
Los votos en contra provinieron de Giovanni Gómez, de Restauración Nacional, y Pedro Muñoz, del PUSC.
Tras su aprobación en primer debate, se fijó la votación del proyecto en segundo debate para el 20 de abril, luego de lo cual solamente restaría la firma presidencial para que sea ley.
Ya dicho artículo había sido modificado por resolución de la Sala Constitucional del 8 de agosto del 2018, cuando declaró nulo que la unión de hecho deba ser entre hombre y mujer; por lo tanto, la norma aprobada sobre la relación a partir de los dos años aplicaría tanto para uniones entre hombre y mujer como para las uniones igualitarias entre personas del mismo sexo.