Está claro que existe un gran abanico de posibilidades de cómo utilizar la tecnología. La pregunta obvia es ¿a quién le corresponde echar a andar estas cosas en el Estado? Y la otra pregunta es: ¿cuándo empezaremos a ver cambios importantes?
Nadie duda de que la tecnología es una poderosa herramienta para la solución de los principales problemas del país. ¿Cómo la usaría cada candidato en los ámbitos de salud, seguridad, movilidad, educación y productividad agrícola?
Está claro que la tecnología seguirá cambiando nuestras vidas a un ritmo cada vez más veloz, pero predecir el futuro también será cada vez más complicado
Antes, los algoritmos eran buenísimos para predecir qué querían ver los usuarios y lo entregaban con eficiencia. Después sobrevino la degradación constante del servicio
Si se limpian y anonimizan todos los datos del sector público, el valor que se puede extraer de ese acervo de información es enorme
No me sorprendió para nada leer que inteligencia artificial y computación cuántica son dos de las tres tecnologías estratégicas de China. La tercera sí me sorprendió.