Resulta extraña la naturalidad con la que Hacienda justificó el uso de las letras del tesoro como instrumento para financiarse a menor costo, cuando más bien fueron concebidas como una excepción muy calificada
Resulta extraña la naturalidad con la que Hacienda justificó el uso de las letras del tesoro como instrumento para financiarse a menor costo, cuando más bien fueron concebidas como una excepción muy calificada