
El cierre de un año suele convertirse en una pausa necesaria para mirar atrás, agradecer y proyectar lo que viene. Cuando el calendario se renueva, muchos aprovechan para formular deseos sencillos, otros piden claridad, salud o nuevas oportunidades.
Así ocurre también entre varias figuras de la televisión y las redes sociales costarricenses, quienes reciben el Año Nuevo con reflexiones personales y peticiones cargadas de significado.
Para Ítalo Marenco, el cambio de año llega tras meses intensos y decisiones profesionales que marcaron su rumbo. El presentador se preparó primero con unos días de descanso, y luego de retomar su agenda laboral en los Toros de Teletica, mira el futuro con optimismo. De cara al nuevo ciclo, su deseo se enfoca en los nuevos comienzos y en el valor de generar bienestar en los demás.
Esa misma visión espiritual la comparte su esposa, la locutora Cindy Villalta, quien resume sus anhelos en seguir el camino que consideran correcto como familia. Para ella, la prioridad está puesta en la salud y en mantenerse unidos ante lo que depare el año que inicia.
“Siempre seguir el camino que Dios quiere para nosotros como familia, porque al final es lo que Él quiera. Nosotros siempre en ese camino. Salud para mi hija, para nosotros, y a ver qué nos trae este año”, comentó a este medio.
En los últimos meses, la familia vivió fuertes transiciones, pues Marenco cambió de trabajo de forma inesperada de Repretel a Teletica, donde ya participó en uno de los formatos del canal, Mira quién baila, para luego retornar a la arena de los toros en la pantalla del trencito.

La empresaria y modelo Ericka Morera también recibe el Año Nuevo con deseos claros y directos. Su lista no es extensa, pero sí profunda: bienestar para los suyos, estabilidad laboral y amor en abundancia. Una fórmula que, asegura, resume lo esencial para encarar cualquier reto.
En el caso de Natalia Rodríguez, el inicio de un nuevo año siempre tiene un peso simbólico mayor. Tras el accidente que marcó su vida, la presentadora ha convertido cada cierre de ciclo en un acto de gratitud y fe. Su petición combina humor, aprendizaje y esperanza.
“Salud, que no se me atraviesen puertas de vidrio (por su accidente), y desde que me pasó el accidente me gusta pedirle a Dios que me sorprenda. Eso es lo que quiero”, expresó.

El DJ y bailarín Neto Rangel, por su parte, opta por un mensaje de agradecimiento más que de petición. Para él, la salud sigue siendo el eje principal, acompañado de una profunda conciencia sobre lo recibido en el año que termina.
“Salud, nada más, eso es lo que le pido a Diosito. Más que pedir, tengo que agradecer por todo lo que me ha dado”, señaló.
Con la serenidad que lo caracteriza, Édgar Silva también coloca la salud como punto de partida, pero amplía su deseo hacia un equilibrio entre crecimiento profesional y disfrute personal. El comunicador considera que prosperar no está reñido con vivir bien y con saborear los pequeños placeres.
“No quiero sonar cajonero, pero arranco con la salud, que es la base de todo. Oportunidades para prosperar, crecer profesionalmente a estas alturas y tener una vida muy balanceada. Me gusta trabajar, pero también me gusta comer rico”, dijo entre risas.

Finalmente, Karina Ramos recibe el Año Nuevo con la satisfacción de un periodo exitoso, tanto en lo personal como en lo profesional. Tras un año de intensa actividad internacional, la modelo costarricense desea que el próximo ciclo mantenga esa misma energía positiva.
“Para el próximo año solo pido que sea igual o mejor que este. Ha sido un año increíble”, afirmó.
Más allá de agendas, proyectos o exposición mediática, los deseos de estas figuras coinciden en lo esencial: salud, gratitud, equilibrio y esperanza. Peticiones que reflejan que, al final, el inicio de un nuevo año se vive con los pies en la tierra y la mirada puesta en lo esencial.
