Aunque su nombre no sea tan conocido como el de Johnny Araya, el alcalde de San Ramón, Nixon Ureña, se convirtió en uno de los gobernantes municipales con más incidencia en el Partido Liberación Nacional (PLN) y en la Asamblea Legislativa.
Ureña, quien fue allanado este miércoles por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) por presuntos nombramientos ilegales y malversación de fondos, ha sido uno de los principales nombres detrás de proyectos de ley y de movimientos en la estructura del PLN.
En Cuesta de Moras, el alcalde ha mantenido estrecha comunicación con el diputado ramonense Daniel Ulate Valenciano, también de Liberación, quien saltó a la curul desde el puesto de asesor de Ureña en la Municipalidad de San Ramón.
El jerarca municipal tiene otros congresistas cercanos como el exalcalde alajuelense Roberto Thompson, el secretario general liberacionista, Gustavo Viales; la actual jefa de fracción verdiblanca, María José Corrales, y el socialcristiano Erwen Masís, exalcalde de San Mateo.
De hecho, Ureña fue uno de los principales promotores, como vocero del bloque de alcaldes del PLN de Alajuela, de que Liberación permitiera a los gobernantes municipales escoger un candidato presidencial afín a ellos para los comicios del 2022.
Para enero del 2021, el jerarca ramonense intentaba tejer los apoyos necesarios para que Thompson fuera el candidato presidencial liberacionista, tanto así que se reunió con Rolando Araya y el diputado alajuelense en la casa del exlegislador Luis Carlos Araya, en Palmares, para intentar concretar esa intención.
Aunque una mayoría de alcaldes fue abandonando poco a poco a Thompson, Ureña se mantuvo con el diputado hasta la convención verdiblanca, en que José María Figueres resultó elegido.
Previamente, ese grupo de alcaldes había logrado dar un golpe importante desde la Asamblea Nacional del PLN, en diciembre del 2020, donde impusieron su criterio para exigir siete escaños más para el régimen municipal en ese órgano partidario.
Para lograrlo, le quitaron sus sillas a otros movimientos y sectores. Pero sobre todo y más importante, le quitaron al candidato presidencial, en el estatuto partidario, la potestad para nombrar cuatro aspirantes a diputado a dedo y le dejaron solo la opción de nombrar uno.
Nuevamente Nixon Ureña fue clave para consolidar esas pretensiones de los alcaldes en ambas gestiones.
Salida de la regla fiscal
El alcalde de San Ramón también fue una de las mentes detrás del proyecto para eximir a las municipalidades de cumplir la regla fiscal, de la mano del josefino Johnny Araya, y líderes de la Unión Nacional de Gobiernos Locales (UNGL), organismo liderado por Liberación Nacional.
Durante la primera mitad del 2020, Ureña era un constante asistente a las manifestaciones que se realizaban en las afueras de la Asamblea Legislativa y fungió como negociador con diputados para lograr ese objetivo municipal.
El caso del candidato a magistrado
El nombre de Nixon Ureña también apareció en medio de un escándalo en el plenario legislativo cuando, en diciembre del 2019, un grupo de 12 legisladores votaron de manera sorpresiva por el juez penal de San Ramón, Gregorio José Briglia, para magistrado de la Corte Suprema de Justicia.
En ese momento, se conoció que Briglia era la pareja de una abogada nombrada por Ureña en la Municipalidad de San Ramón. El diputado del PUSC, Pedro Muñoz, dijo que Briglia era impulsado por los liberacionistas Ulate, Thompson y Corrales, así como el socialcristiano Erwen Masís. Los liberacionistas lo negaron y se enfrentaron a Pedro Muñoz, pero Erwen Masís sí lo reconoció.
Gregorio Briglia es también uno de los miembros nombrados por Figueres Olsen como miembro de su Comisión de Transparencia y Ética.
Actualmente, el alcalde ramonense es defendido legalmente por su tío materno, el exdirector del OIJ, Rafael Ángel Guillén Elizondo, quien además es uno de los miembros de la comisión de ética de José María Figueres Olsen.
Ese órgano de la campaña emitió un comunicado en el que desmarca a la campaña de Figueres de Nixon Ureña.
El etiquetado de licores
Junto con Daniel Ulate, el alcalde Ureña impulsó fuertemente el proyecto de ley que obligó al Ministerio de Hacienda a contratar un polémico sistema de etiquetado de licores, que además le da potestades extraordinarias a las municipalidades en la persecución del contrabando de licores.
Como vocero de la Asociación Nacional de Alcaldías e Intendencias (ANAI), Nixon Ureña fue al Congreso a defender la iniciativa en una comisión legislativa, en compañía del socialcristiano Horacio Alvarado, alcalde de Belén.
En declaraciones a medios, en agosto del 2019, el alcalde de San Ramón calificó como urgente ese proyecto, que a la postre fue aprobado, luego de numerosas modificaciones y de dejar a discreción de Hacienda si podía contratar el sistema de etiquetado.
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Intervención en un 1.° de mayo
En el 2019, cuando Liberación Nacional se preparaba para pelear por la presidencia de la Asamblea Legislativa con el apoyo del Partido Acción Ciudadana (PAC), Ureña lideró una arremetida de los alcaldes contra esa intención, en que la candidatura verdiblanca era del diputado Carlos Ricardo Benavides.
El ramonense alegó, en aquel momento, que no era conveniente ir a esa elección de la mano del PAC y trató de descarrilar la aspiración de Benavides de la mano de los diputados Thompson, Ulate, Corrales y Gustavo Viales, quienes habían advertido que no apoyarían a su compañero de fracción si la alianza era con el oficialismo.
Finalmente, la decisión de la mayoría fue empujar a Benavides y apoyar a Laura Guido para la primera secretaría del Directorio, pero el diputado más afín a Nixon Ureña, Daniel Ulate, se salió del plenario para no votar por la oficialista.
En la campaña del 2018, la imagen del alcalde fue primordial en la campaña del actual diputado Daniel Ulate. Lo mismo hicieron para las elecciones municipales del 2020, en las que Ureña se reeligió.
En su carrera anterior a obtener la alcaldía ramonense, Ureña había sido presidente de la Juventud del PLN, entre el 2005 y el 2009, y durante su último año en ese cargo laboró como asesor del entonces diputado de la Unidad, Jorge Eduardo Sánchez. Actualmente, es delegado nacional de Liberación, en representación de la provincia de Alajuela.