
El ministro de Comunicación Arnold Zamora Miranda defendió su decisión de revelar públicamente la identidad del joven que lo denunció por una presunta violación, argumentando su derecho a la defensa y aseguró que demostrará su inocencia con “pruebas absolutas”.
Zamora atendió este miércoles a los medios de comunicación que lo abordaron tras salir de la Fiscalía General, a donde acudió con su abogado Edgardo García, para enterarse del proceso. No obstante, dicha gestión no se concretó pues, según le explicaron, aún falta determinar si es en ese despacho u otro donde se llevará la causa.
Al ser cuestionado por revelar el nombre del joven que lo denunció, Zamora alegó defender sus derechos.
“Estoy seguro que se va a demostrar mi inocencia, entonces qué van a decir, ¿que yo nunca dije las cosas como son? ¿Por qué no tenía que decir el nombre? Fue un caso que ocurrió entre dos personas adultas y tengo las pruebas absolutas de que eso ocurrió así”, declaró.
El ministro rechazó las críticas sobre la violación de la protección legal hacia las víctimas de delitos sexuales. “Todos los medios han hablado de mí, yo tengo el derecho de defenderme y tengo el derecho de ver al pueblo de Costa Rica, a mi familia y a ustedes que han sido mis colegas por mucho tiempo, para decirles que soy inocente”, agregó.
Zamora aseguró que tiene el respaldo del presidente Rodrigo Chaves. “Me da todo el apoyo”, declaró. Además, descartó que el mandatario le haya sugerido apartarse del cargo: “Absolutamente no y si él lo ocupa que me lo diga, pero hasta el momento no”.
En cuanto a los detalles de la denuncia, Zamora esquivó responder ya que teme que podría comprometer el proceso. “Ahorita es muy difícil porque está en el proceso de recabar prueba, decir cosas podría complicarlo, con mucho gusto cuando ya mi abogado me lo permita se los contaré”, dijo.
Hechos investigados
La denuncia por presunta violación hace referencia a hechos que habrían ocurrido en un lujoso hotel al oeste de San José entre el sábado por la noche y el domingo en la madrugada.
En la causa se investiga si el denunciante habría sido drogado antes del presunto delito sexual.
El ministro dio a entender, que al igual que el ofendido, se sometió a exámenes forenses y negó haber tenido reservada previamente la habitación del hotel donde habrían ocurrido los hechos. “No señor y lo voy a demostrar, ojalá y vaya a preguntar al hotel”, añadió el funcionario.
Sobre el motivo de la reunión con la presunta víctima, el ministro dijo que se trató de un encuentro personal. “Es un tema totalmente personal y privado, como les digo, me encantaría darles los detalles pero no puedo porque cualquier cosa que diga hoy, a como está la situación en este momento en el país se me puede revertir”, explicó.
La Nación le consultó al jerarca por la inquietud que expresó el abogado del ofendido, en cuanto a que el joven pueda sufrir represalias por tratarse de un funcionario de un despacho que hace coordinaciones con el puesto que desempeña Zamora como ministro de Comunicación.
“¿Usted ve aquí una pistola?, ¿ve un arma o algo que yo vaya a hacer? no, se respetará al señor, a este adulto de 25 años, no puedo tener comunicación con él, ni nadie puede tener comunicación con él, él se defenderá y yo me defenderé. No es alguien que está bajo mi jurisdicción”, contestó Zamora.
También se le preguntó por qué decidió visitar directamente la Fiscalía General para reunirse con el fiscal general Carlo Díaz y al respecto argumentó que es esa instancia la que atiende los casos de la Presidencia. También dijo que fue Díaz quien divulgó a la prensa el tipo de delito que se persigue y otros detalles del caso.
El ministro defendió haber utilizado medios oficiales para responder a las consultas periodísticas. “La forma de canalizar mi respuesta fue a través de los chats y el correo electrónico de Casa Presidencial, así de sencillo, hoy soy ministro”, justificó.
