
Tegucigalpa, Honduras.- “Vive, vive, Cartago vive”... Esa es una de las frases predilectas del periodista y narrador Rodolfo Méndez Durán, quien reúne los atestados para ser considerado el comunicador más brumoso del país.
Sentado al lado de Anthony Porras y ambos con micrófono en mano, ellos transmitieron en Columbia el partido entre Olimpia y Cartaginés, en el que los brumosos quedaron eliminados de la Copa Centroamericana de Concacaf.
LEA MÁS: Olimpia se deshace de Cartaginés y será el rival de Alajuelense en ‘final’ adelantada
Rodolfo Méndez vivió la serie con una mezcla de calma profesional y un profundo, aunque controlado, dolor de aficionado.
Sentía la emoción de ver a su equipo en la capital de Honduras, en una instancia a la que otros clubes ticos no pudieron llegar. Pese a la derrota, no oculta las esperanzas que aún guarda para el club de sus amores.
Cartaginés jugará un repechaje contra Motagua, en el último chance que tienen los blanquiazules para intentar obtener un boleto a la próxima edición de la Copa de Campeones de Concacaf.
“Viví la serie con mucha tranquilidad, con mucha calma,” confesó Rodolfo Méndez a La Nación, luego de que se apagaron los micrófonos en el Estadio “Chelato” Uclés.
LEA MÁS: El lamento de Carevic tras la eliminación de Cartaginés y las palabras hacia sus jugadores
Esta paz, sin embargo, es un manto que cubre la pasión de su origen: “Hay una cosa, soy brumoso y de los más brumosos”, pronunció con orgullo.
De ahí que desde hace unos años creó su propio medio de comunicación sobre los blanquiazules, RM Deportes, que pronto se volvió una referencia para los seguidores de la institución.
Rodolfo Méndez es conocido por su profundo amor por el Club Sport Cartaginés, una pasión que lo ha llevado a los extremos de la emoción.
“Yo sufro mucho cuando Cartaginés pierde y me alegré y lloré cuando Cartaginés fue campeón”, recordó.
No obstante, al estar en Tegucigalpa, su rol de narrador y periodista le exigía una barrera: “Cuando uno está narrando es diferente”.
A pesar de la eliminación, el comunicador no oculta la emoción que sintió durante el partido. Hubo un momento, tras el empate de Cartaginés, donde la esperanza se disparó.
“Sentí que en algún momento se pudo,” relató, recordando las jugadas que pudieron cambiar el destino de la serie.
“Después de que Cartaginés empató tuvo algunas otras opciones, la que sacan de la raya, la que se pega en el tubo y sentí que se podía haber sacado la tarea”, detalló.
La derrota, sin embargo, no borra su tranquilidad por el esfuerzo.
“Me queda la satisfacción de que Cartaginés lo intentó, que vino a competir contra un gran equipo. No vamos a tapar el sol con un dedo, Olimpia tiene cinco futbolistas que quizás sean titulares con Honduras en el partido contra Costa Rica, la próxima semana”, indicó.
Rodolfo Méndez: ‘Siempre se sufre’
El título de la tercera edición de la Copa Centroamericana ahora es un asunto de cuatro equipos: Liga Deportiva Alajuelense, Real España, Xelajú y Olimpia.
Pero Rodolfo Méndez ya tiene la mirada puesta en el siguiente gran desafío de los brumosos, que será buscar ese pase a la Copa de Campeones de Concacaf, en la repesca ante Motagua.
“De verdad que sí me dolió un poco no haber sacado la tarea, pero satisfecho porque el equipo la pulseó,” afirmó, resignado a que “siempre se sufre y hay que sufrir,” como ya lo experimentó en 2022, cuando Cartaginés acabó su sequía de más de 80 años sin ser campeón nacional.
Por eso, insiste en que el equipo a cargo de Andrés Carevic ahora lo que debe hacer es meterse en la cabeza que tiene todo para ir a Concachampions.
“Ya no se pudo seguir en Copa Centroamericana, pero queda ese objetivo, estar en la Concachampions. Ya otros no lo pudieron hacer, pero queda eso y no lo veo agarrado del cielo, creo que hay posibilidades. Viendo a Motagua y viendo Cartaginés, siento muchas posibilidades de estar en la Copa de Campeones”, pronunció.
Para él, la pasión sigue intacta, el sufrimiento es parte de ese amor azul y se fue de Honduras con la esperanza de ver a Cartaginés logrando su clasificación a finales de mes.
Esa ilusión se mantiene viva en el corazón del periodista más brumoso, incluso después de un doloroso encuentro que le dejó un sinsabor a los de la Vieja Metrópoli en tierras catrachas, un lugar al que deben volver para jugar ese repechaje.
