
El nombre del exmagistrado Celso Gamboa Sánchez apareció en una alerta de la Oficialía de Cumplimiento Corporativa del Instituto Nacional de Seguros (INS) cuando dos agentes de seguros, en representación de una pequeña cooperativa, trataron de introducir $10 millones al puesto de bolsa INS Valores. Así lo confirmó el exgerente general del INS, Luis Fernando Monge, quien relató que Federico “Choreco” Cruz, amigo y exasesor de imagen del presidente Rodrigo Chaves, presionó para que la transacción se realizara.
En una entrevista exclusiva con La Nación, el exgerente del INS explicó que los interesados pretendían hacer varios depósitos hasta alcanzar los $100 millones (unos ¢50.000 millones), pero el oficial de cumplimiento, Roy Campos, descubrió que el exmagistrado, actualmente acusado en Estados Unidos por presunto narcotráfico, estaba vinculado a varias empresas donde aparecían los dos agentes que querían introducir el dinero.

Luis Fernando Monge recordó que en agosto del 2024, estando en Panamá, la presidenta ejecutiva del INS, Gabriela Chacón, recibió una llamada del exasesor de Chaves, quien la presionó para que se permitiera la transacción de los $10 millones. “Era Choreco, me estaba preguntando por una transferencia que está por ingresar al puesto de bolsa, que qué ha pasado”, le dijo ella cuando colgó, según narró el exgerente. Él sostuvo que la puso al tanto de la alerta de la Oficialía de Cumplimiento.
En ese mismo mes, Celso Gamboa se desempeñó como abogado del exasesor presidencial cuando la Policía lo desalojó de la vivienda que alquilaba con opción de compra en el condominio Barlovento, en Concepción de La Unión, en Cartago.
Esa es la misma residencia que se menciona en el expediente judicial conocido como BCIE-Cariñitos porque, según la Fiscalía, el mandatario Rodrigo Chaves obligó al empresario Cristian Bulgarelli a entregar $32.000 a Choreco para que enganchara la casa. El dinero provenía de un contrato de servicios de comunicación para la Presidencia, financiado por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).

Celso Gamboa es la ‘persona muy cuestionada’
El pasado 18 de diciembre, ante la Asamblea Legislativa, el exgerente del INS dio a conocer la gestión de los agentes de seguros conectados con una “persona muy cuestionada”.
Ahora, en entrevista con La Nación, Monge confirmó que esa persona es Celso Gamboa. La transacción no prosperó porque la Oficialía de Cumplimiento Corporativa emitió una alerta para frenarla. Para ese momento, el exmagistrado no era requerido por la Justicia de Estados Unidos, pero sí había cuestionamientos en el ámbito financiero.
El argumento de los agentes para tratar de meter el dinero
Monge recordó que los agentes primero se habían acercado con la intención de comprar una cartera de préstamos de empleados del INS, un negocio que rondaba los $3 millones o $4 millones, pero esa opción se descartó.
Meses después, el jefe de corredores del puesto de bolsa lo contactó por una transferencia de $10 millones.
“Me dijo: ‘Tenemos un negocio de unas personas que están transfiriendo $10 millones para el puesto bolsa; ellos dicen que es para un negocio del cual usted está completamente enterado, que más bien que usted nos explique de qué se trata para nosotros poder documentar el origen de los recursos’.
“Entonces yo le dije: ‘Mirá, esto no me suena, sí me suenan las personas, me suena que había una negociación con el INS, pero el monto ya es otra cosa, son $10 millones, y lo que habíamos hablado en su momento era de $3,5 millones’. Y esta persona me responde: ‘Y ellos dicen que esta va ser la primera de varias transferencias de $10 millones’”.
Monge: ‘A puro olfato dijimos que eso no iba’
Posterior a esa conversación, el entonces gerente de INS Valores, Freddy Quesada, contactó al otrora gerente general del Instituto y este reiteró que no sabía nada de los $10 millones.
Ambos concluyeron que la transferencia no se debía autorizar e inmediatamente pidieron la intervención de la Oficialía de Cumplimiento, para que realizara un estudio de los dos agentes y de la cooperativa.
“A puro olfato dijimos que eso no iba, había una inconsistencia muy rara; primero, ¿cómo me citan a mí para validar la fuente del origen de los recursos?, y segundo, el tema de la cartera de créditos para los funcionarios ya se había archivado, ya ni siquiera estaba en los planes del INS”, contó Monge.
“Es muy poco común que llegue un cliente al puesto de bolsa con $10 millones. Yo creo que ad portas no se les dijo que no, porque me mencionaron a mí, que yo estaba enterado; de lo contrario, era una operación muy sospechosa”, añadió.
Salió el nombre de Celso Gamboa en el informe
Después de esa decisión inicial, llegó el resultado de la investigación de la Oficialía de Cumplimiento y es donde apareció el nombre de Celso Gamboa. Inmediatamente, las alertas se encienden y se le dijo a los dos agentes que “esto no se va a aceptar”.
“En medio de todo eso, sale el nombre de Celso Gamboa. Todavía no estaba en la cárcel, pero era un nombre que sonaba y sonaba. Entonces, en ese momento dijimos: ‘Esta transferencia no se va a aceptar’ (...). Normalmente cuando hay una alerta (del oficial de cumplimiento) el rechazo es casi automático”, dijo Monge a este diario.
“Como que salía mencionado en las sociedades de esas mismas dos personas de la cooperativa”, agregó.
Para ese momento, ya Mónica Araya no era la presidenta del INS (fue destituida en mayo del 2024) y, en su lugar, había sido nombrada su exjefa de despacho: Gabriela Chacón.

La llamada en Panamá: ‘Era Choreco’
De seguido a la negativa, en agosto del 2024, Luis Fernando Monge viajó con Chacón por negocios a Panamá para reunirse con algunos inversionistas y, en ese momento, ella recibió la llamada de Choreco presionando por esa transferencia de $10 millones.
“Estábamos a punto de atender un almuerzo, estábamos bajándonos del carro, cuando ella recibe una llamada. Se quedó hablando en la acera y yo la esperé por cortesía, para que después no entrara sola, y ya cuando termina de hablar yo le pregunto que quién era”, recordó el exgerente. La presidenta ejecutiva le respondió que Choreco estaba preguntando por la transacción.
”Entonces, creo que ya algo le había dicho, pero en ese momento le doy toda la información, le digo que esa transferencia no se va a aceptar nunca, que tiene todos estos problemas.
”Ella entonces me respondió: ‘Se lo voy a informar al señor presidente de la República’. Y yo le digo: ‘Tenga cuidado con estas cosas porque para todos es conocido que Choreco y don Rodrigo son muy cercanos’. Entonces, ella me dice: ‘Yo creo que ya no tanto’.
”Tiempo después yo le pregunté: ‘¿Y qué digo don Rodrigo?’ Y entonces ella me dijo: ‘Que que bien que rechazamos ese dinero, que como tiene que ser’. Y bueno, para mí fue un tema cerrado", concluyó Monge.
Presidenta del INS alegó no tener información a mano
El 18 de diciembre, ante los diputados, cuando Monge narró las primeras pinceladas de esta transacción sospechosa y la participación de Choreco y Celso Gamboa, a su lado estaba la jerarca del INS, Gabriela Chacón, quien no desmintió lo que él estaba contando.
Solo adujo que ella no tenía información a mano y que Luis Fernando Monge solo estaba presentado una parte de la historia.
“Sobre la cooperativa y esos temas, no. Ahorita no me acuerdo de la información; creo que don Luis solo está dando una parte de la historia”, manifestó Chacón ese día.
Ante una pregunta de la legisladora independiente Kattia Cambronero, la jerarca del INS aseguró que no tenía conocimiento de esos “temas muy operativos”.
Monge fue destituido de la Gerencia General en noviembre pasado, bajo el argumento de que la entidad registró pérdidas récord el año pasado.
Este diario solicitó al INS, a través de su oficina de prensa, una copia del informe emitido por la Oficialía de Cumplimiento sobre este tema. Sin embargo, tal petición fue rechazada.
“No es posible acceder a dicha solicitud, debido a que dichos documentos son parte de los análisis realizados por la Oficialía de Cumplimiento, sobre casos que fueron gestionados según disponen las normas que rigen la materia de legitimación de capitales, financiamiento al terrorismo y prevención de la proliferación de armas de destrucción masiva, por lo que, respecto de dicha información, el INS tiene una obligación de confidencialidad dispuesta”, respondió esa dependencia en un correo electrónico.
Mediante los registros de entradas y salidas al país de la Dirección General de Migración y Extranjería, este diario verificó que Chacón estuvo fuera de Costa Rica entre el 7 y el 10 de agosto del 2024.
No era una sola transferencia
El exgerente se reservó el nombre de los dos agentes, así como el de la cooperativa. Solo dijo que era pequeña y que no era supervisada. Sí detalló que la transacción de $10 millones sería la primera de varias hasta llegar a los $100 millones (unos ¢50.000 millones).
“No era una sola transferencia. Ellos hablaban, según me dijo un funcionario del puesto de bolsa, que iban a hacer varias transferencias. Yo sí recuerdo que por ahí me dijeron: 'Eso puede llegar a ser un negocio de $100 millones’, como que era la primera de varias transferencias”, afirmó el exgerente del INS.
Primer contacto hace dos años
De acuerdo con la versión de Luis Fernando Monge, hubo un primer acercamiento con los agentes hace aproximadamente dos años. En representación de una cooperativa, llegaron al INS planteando un negocio. Ellos pretendían abrir una línea de créditos para los funcionarios de la aseguradora estatal, pues para aquel entonces más del 50% tenía un alto nivel de endeudamiento.
La única condición que pedían a cambio era que la cuota del préstamo se dedujera, de manera mensual, automáticamente del salario del trabajador.
En aquel momento, según Monge, ellos le dijeron que estaban “a punto de recibir un fondeo del exterior de $3 millones a 4 millones”. Sin embargo, no especificaron de dónde exactamente, pero sí mencionaron que de un país de Europa.
Tras ese primer encuentro, el cual fue gestionado por el propio Monge, ya que él conocía a los agentes desde antes, porque según dijo, “eran conocidos en el medio de seguros”, incluso clientes del INS, vinieron varias reuniones más.
En uno de esos encuentros, salió la idea de que el INS les vendía una cartera de créditos ya existente. Pero al final ese plan no prosperó porque ellos pidieron un descuento y el INS, al ser una institución pública, no puede vender algo por debajo del valor en libros.
Luego de las fallidas negociaciones, el tema se archivó y nunca se volvió a hablar del asunto. Monge no recuerda sí lo conversó con la Presidencia Ejecutiva, adujo que no era un tema relevante en ese momento.

