
¿Le ha pasado que está en una fiesta o en un restaurante, escucha a las personas hablar, pero no logra entender bien lo que dicen? Esa es una de las primeras señales de pérdida auditiva, una condición silenciosa que ya afecta a miles de costarricenses y que puede presentarse a cualquier edad.
Lo que debe saber:
- La pérdida auditiva no se nota a simple vista, pero sus primeras señales son claras si aprendemos a reconocerlas.
- Factores como infecciones recurrentes, exposición al ruido, enfermedades crónicas e incluso el COVID-19 pueden detonar la condición.
- Un chequeo auditivo por año, o cada seis meses en mayores de 50 años, es clave para prevenir complicaciones.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor de 217 millones de personas en América viven con pérdida auditiva, es decir, el 21,52% de la población, y se espera que para el 2050, este número aumente a 322 millones.
De ahí que resulta importante que usted conozca las señales de pérdida auditiva que pueden pasar desapercibidas, así como las acciones que debe realizar para evitar formar parte de las cifras antes mencionadas, pero sobretodo, para que su calidad de vida no se vea afectada.
Y es que, a diferencia de otros problemas de salud, la pérdida de audición no genera dolor ni presenta síntomas visibles. Eso la convierte en una condición silenciosa, que pasa desapercibida hasta que interfiere con la vida cotidiana.
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Señales tempranas de pérdida auditiva
Sergio Granados, especialista en Audiología del Centro Médico Cristal, explica que la primera señal suele aparecer en ambientes ruidosos: reuniones, restaurantes o fiestas donde las personas sienten que escuchan, pero no logran entender lo que les dicen. A partir de ahí, el camino hacia un diagnóstico puede tomar meses o incluso años.
Entre las señales más comunes destacan:
- Dificultad para comprender en ambientes con ruido.
- Tinnitus, ruidos molestos o zumbidos constantes en los oídos.
- Vértigo o inestabilidad, relacionados con el rol del oído en el equilibrio.
- Problemas al usar dispositivos electrónicos, como llamadas en el celular, ver televisión o escuchar música con pérdida de calidad.
En etapas más avanzadas, la pérdida auditiva puede provocar aislamiento social, ansiedad, depresión y hasta pérdida de memoria, lo que indica que no se trata únicamente de un problema fisiológico, sino también emocional y cognitivo.
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Factores de riesgo y el uso de audífonos para escuchar música en jóvenes
Con el paso del tiempo permanece la creencia de que la pérdida de audición ocurre con la edad, sin embargo, el especialista menciona que esto es un mito, ya que puede presentarse en cualquier momento de la vida.
“En Costa Rica tenemos una sordera hereditaria única en el mundo, aquí en Cartago, que es la llamada Sordera de los Monge. Entonces son personas que, de una familia en específico, va perdiendo la audición poquito a poco, hasta quedar completamente sordos“, explicó Granados.
Algunos factores a tomar en cuenta son:
- Congénitas y hereditarias, como la llamada Sordera de los Monge.
- Adquiridas, entre ellas infecciones de oído, exposición constante al ruido, enfermedades crónicas como diabetes e hipertensión, e incluso secuelas del COVID-19.
- Un cambio notable en los últimos años es que más jóvenes acuden a consulta con síntomas de pérdida auditiva. El diagnóstico frecuente en estos casos es la Pérdida Auditiva Inducida por Ruido (PAIR), que antes se asociaba a personas que trabajaban en ambientes industriales y hoy aparece en adolescentes y adultos jóvenes por el uso excesivo de audífonos.
- Subir demasiado el volumen, utilizar auriculares por horas y no dar descanso a los oídos puede desencadenar no solo pérdida auditiva progresiva, sino también tinnitus, un síntoma particularmente molesto y difícil de manejar.

¿Cómo prevenir o tratar la pérdida auditiva?
- Los especialistas recomiendan realizarse una audiometría al menos una vez al año, al igual que ocurre con los chequeos dentales u oftalmológicos.
- En personas mayores de 50 años o con factores de riesgo, el control debería hacerse cada seis meses.
- Identificar la pérdida de audición en etapas tempranas permite iniciar un tratamiento adecuado y mejorar la calidad de vida.
- Cuando se confirma el diagnóstico de pérdida auditiva, la principal herramienta de rehabilitación son los audífonos, que permiten recuperar la función auditiva y evitar un deterioro mayor.
- En otros casos, puede requerirse la atención de un otorrinolaringólogo u otros profesionales de manera multidisciplinaria.
Reconocer las señales tempranas, realizar chequeos periódicos y atender los factores de riesgo son pasos clave para evitar que esta discapacidad invisible impacte negativamente su calidad de vida.
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