
El Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) anunció este 22 de junio que realizará vertidos controlados de agua en la represa de la planta hidroeléctrica Reventazón, por lo cual alertó a las comunidades aguas abajo para que tomen las precauciones necesarias.
Desde el domingo 23 de junio hasta el 14 de julio, el ICE ejecutará una operación de mantenimiento planificada en el embalse de la planta, localizada en el cantón de Siquirres, provincia de Limón.
Estos trabajos implicarán vertidos controlados con caudales cercanos a los 400 metros cúbicos por segundo, según indicó la empresa en un comunicado.
El Instituto no detalló la naturaleza exacta de los trabajos, pero afirmó que corresponden a mantenimientos definidos en los manuales de diseño. “Según los análisis técnicos y los pronósticos climáticos del Instituto, el periodo escogido es idóneo para la maniobra”, agregó el ICE.
En julio de 2018, el ICE también realizó vertidos de agua debido a las fuertes lluvias. Dos meses antes, en mayo de 2018, el Instituto admitió la gravedad de una grieta en la infraestructura, lo que obligó a ampliar el plazo de las reparaciones en curso.
La planta había estado apagada desde el 15 de febrero de 2018 y el ICE estimó inicialmente que volvería a operar en tres meses, pero los trabajos se extendieron por varias semanas más.
LEA MÁS: Problema geológico ‘complejo y delicado’ deteriora planta Reventazón del ICE
“Se identificó que la longitud de la fractura que provocó la infiltración de agua en el macizo rocoso requería un tratamiento más amplio, incrementando el volumen de trabajo en la zona del vertedero, específicamente en las labores de inyección, losa de concreto y sistemas de drenaje”, precisó la entidad en mayo de 2018.
La grieta, que permitía la salida de hasta 180 litros de agua por segundo, se encontraba frente a las compuertas del vertedero de excedencias.
El 15 de abril de 2021, el ICE realizó una maniobra similar debido a fuertes lluvias, activando sus protocolos preventivos para regular el nivel del embalse mediante vertidos controlados.
Posteriormente, en setiembre de 2022, apareció una nueva grieta en la hidroeléctrica debido a filtraciones de agua en una galería o túnel próximo al vertedero de la represa.
El ICE confirmó esta rotura en el Sistema de Compras Públicas (Sicop) y en setiembre de 2022 publicó un concurso para contratar la instalación de transductores de desplazamiento con cable.
Estos dispositivos permiten vigilar la grieta en la galería 220 MD, situada a la derecha del vertedero de excedentes de agua del embalse.
Los transductores de desplazamiento son sensores que miden la posición y el desplazamiento lineal de un objeto a lo largo de un único eje mediante el uso de un cable flexible. Transforman una magnitud física en una señal eléctrica, registrando el movimiento y siendo útiles para detectar magnitudes físicas como humedad en el aire, caudales o presiones sonoras y geológicas, entre otras.
LEA MÁS: Jerarca del ICE reconoce a diputados ‘microgrietas’ y filtraciones en planta Reventazón
