Hoy y mañana serán dos días trascendentales para los impulsores y detractores de la fecundación in vitro (FIV), quienes dirigirán sus miradas a lo que ocurra en la Corte Interamericana de Derechos Humanos, ubicada en Los Yoses.
Allí, en una sala de audiencias, se realizará el juicio en el que 18 personas señalan que el Estado costarricense violó sus derechos al haber prohibido, hace más de una década, dicha técnica médica para embarazos.
A la cita están convocados testigos, peritos, demandantes y sus defensores, así como los siete procuradores que representarán al Estado en lo que será su segundo juicio ante el alto tribunal continental.
Pero tanto los protagonistas como quienes han estado alrededor del tema tienen criterios encontrados. Miguel Mejía Carballo, uno de los demandantes que testificará ante el tribunal, considera la necesidad de reactivar la FIV, especialmente para casos como el suyo, pues un accidente lo dejó sin movilidad y sin posibilidad de procrear con su entonces esposa.
“También es para las futuras parejas, para que no pasen todo lo que hemos pasado muchos a lo largo de una década”, explicó Mejía.
Hubert May, abogado defensor de seis de los 18 demandantes, agregó que en el juicio quedará claro que “ha habido una afectación grave y desproporcional contra las mujeres”.
Quienes están en contra de la FIV también explican lo que podría ocurrir en el juicio.
“Esperamos que la Corte haga la revisión del caso y, a partir de eso, emita una opinión jurídica, y esperamos que sea que respete la vida, que todo ser humano tiene derecho a la vida, incluso desde la concepción”, comentó Luis Fernando Calvo, de la Asociación por la Vida, que el año pasado organizó vigilias en las afueras de la Asamblea Legislativa, donde se discutió un proyecto para avalar la FIV.
Otra de las opositoras, y que asistirá como parte del público, es la legisladora Rita Chaves.
Para ella, la técnica de fecundación in vitro “violenta” la vida desde la concepción.
Quien también asistirá a las audiencias es la defensora de los Habitantes, Ofelia Taitelbaum, quien aseguró que “hay una clarísima discriminación” entre quienes sí pueden pagar por la FIV fuera del país y los que no tienen los recursos económicos para ello.
La Corte Interamericana estima que hoy y mañana asistirá gran cantidad de personas a observar las audiencias, en las que se debatirá si el país debe aprobar, o no, la fecundación in vitro.