Una serie de factores se alinearon para que los precios en el mercado petrolero muestren una marcada tendencia a la baja en este segundo semestre.
Desde junio, el precio de venta del crudo ha caído en un 25%. Después de un periodo de relativa estabilidad, con el barril situado por encima de los $100 desde el 2011, las tarifas se están estabilizando en una banda considerablemente más baja, entre $70 y $90. Así lo informó El País Internacional .
El precio del barril de Brent –el referente para Europa– ha llegado a caer $31, el mayor descenso desde mediados del 2012.
¿Por qué? La producción petrolera ha crecido, producto de una revolución en técnicas de extracción y el creciente aporte al mercado de países no miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), como Estados Unidos.
Al mismo tiempo, con tal de bajar su dependencia petrolera, muchas naciones están optando por alternativas nuevas y limpias para generar energía, lo cual contribuye a que la demanda crezca menos de lo esperado.
A esto se suma el fortalecimiento del dólar, divisa de referencia para el mercado.
Alberto Franco, especialista de Ecoanálisis, resaltó que la oferta también ha crecido, debido a la creciente estabilidad política de productores clave.
“Se ha dado una aceleración importante de la producción en países de la OPEP que habían mostrado gran inestabilidad política (como Libia e Irak) y que habían mermado tremendamente su producción. Eso ayuda”, explicó el economista.
Libia, por ejemplo, con una producción inexistente en setiembre del 2012, ahora coloca en el mercado entre 800.000 y 900.000 barriles diarios, según El País .
Por primera vez en cuatro años, el galón de gasolina en Estados Unidos cuesta menos de $3, dependiendo del estado, y las proyecciones indican que los precios irán cayendo aún más en el 2015.
De acuerdo con la American Automobile Association, hace un año el precio promedio del galón de gasolina regular era de $3,19, mientras que ayer sábado se ubicó en $2,93.
Internamente. Franco destacó que en tanto los estadounidenses pagan entre 20% y 25% menos por galón en el mercado mayorista, en Costa Rica se perciben rebajas entre 7% y 10%. Aunque es significativamente menor, la reducción es un alivio para el país.
Los ajustes han ayudado a que el índice de precios al consumidor (IPC) crezca a un ritmo menor, lo que, a su vez, es positivo en términos de la inflación. La baja les permite a las empresas mejorar su competitividad y, al país, reducir su factura petrolera.
“Este segundo semestre el comportamiento del precio del mercado contrasta con el del primero. Esas alzas iniciales, aunadas a la devaluación del colón, nos pegaron fuertemente”, dijo.
No obstante, para Franco uno de los motivos detrás de esta tendencia es que la economía mundial está creciendo más lentamente (como en China y la eurozona), lo cual podría traducirse, en el caso de Costa Rica, a una caída en las exportaciones.