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Este jueves se desinfló el apoyo a la moción del jefe de fracción del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), Pablo Heriberto Abarca, para llamar al Congreso a voceros de Pfizer y cuestionarlos sobre los contratos de venta de vacunas firmados con el Gobierno de Costa Rica.
La idea del congresista era pedir explicaciones sobre los términos del convenio de venta del fármaco contra la covid-19, como, por ejemplo, la cláusula de confidencialidad.
De los 35 diputados que inicialmente apoyaron la idea el miércoles, 20 ya retiraron su apoyo este jueves.
La desbandada incluye a los diputados del Partido Liberación Nacional, Luis Antonio Aiza, María José Corrales, Luis Fernando Chacón, Silvia Hernández, Ana Lucía Delgado, Ana Karine Niño, Aida Montiel, Paola Valladares, Jorge Luis Fonseca, David Gourzong, Wágner Jiménez y Gustavo Viales.
A ellos se unen las independientes Ivonne Acuña y Zoila Rosa Volio; lo mismo que Floria Segreda, Xiomara Rodríguez, Mileyde Alvarado, Giovanni Gómez y Eduardo Cruickshank de Restauración Nacional y el socialcristiano, Erwen Masís.
Si bien la moción sigue en pie, ya perdió 57% del apoyo inicial.
Aparte del desplome en respaldo, la moción sufrió otro golpe en la Comisión de Control de Ingreso y Gasto Público donde supuestamente sería votada.
La razón es que este jueves no hubo cuórum en ese foro legislativo, indicó la presidenta de la comisión, la liberacionista Yorleni León.
Este revés para la moción se da luego de que la farmacéutica calificara de “irresponsable, injusta e injuriosa” la insinuación de diputados costarricenses en relación con la cláusula de confidencialidad inherente a sus contratos para venderle seis millones de dosis al país.
Según dijo Abarca en un video, la convocatoria apuntaba a cuestionar a estos delegados empresariales sobre “el misterio del contrato, qué es lo que no se puede conocer y por qué hay tanto secretismo y bulla” sobre esa negociación declarada confidencial.
“De manera que esperaríamos que podamos aclarar este tema y tener claro todos los costarricenses cómo es que se está manejando el tema de la vacunación”, expresó el socialcristiano.
En respuesta a sus declaraciones, Pfizer respondió con molestia.
“No vamos a permitir que afirmaciones sin fundamento alguno descarrilen nuestra misión de llevar innovaciones que cambien la vida de los pacientes, propósito que ha cobrado una mayor urgencia en el contexto de esta pandemia”, declaró la firma en respuesta a consultas de La Nación.
Cambio de versión
Consultado este jueves por la pérdida de apoyo para la moción y la reacción de Pfizer, Abarca cambió las razones que lo llevaron a impulsar la propuesta.
Según dijo, cuando les presentó la idea a los diputados fue con la intención de que los voceros de Pfizer les informaran del cronograma de entregas de vacunas y conocer de primera mano con estos delegados si era posible adelantarlas.
“Ese es el único objetivo que tiene la moción. Conocer de primera mano con la empresa si hay posibilidades de adelantar las vacunas y si ese cronograma se mantiene hasta diciembre de la forma como se había indicado en la presentación del ministro Daniel Salas”.
Abarca planteó su moción dos días después de la interpelación en el Congreso del ministro de Salud, Daniel Salas Peraza, quien respondió consultas sobre los mecanismos de compra de las dosis contra la covid-19, en particular de las desarrolladas por Pfizer y BioNTech.
“¡Diay! Ya cada diputado tendrá la potestad de decidir si la vota o no. El objetivo de la moción no es injuriar a nadie. Si no que, en forma transparente, hacer una consulta legítima a la que tenemos derecho todos”, concluyó Abarca.
