
Los gobiernos de Costa Rica y Estados Unidos mantienen negociaciones comerciales bilaterales desde mayo pasado, tras la imposición de la tarifa arancelaria del 15% a las exportaciones ticas. La primera ronda de conversaciones se realizó el 15 y 16 de mayo, y segunda, el 11 al 13 de junio de 2025.
¿Pero quiénes fueron a Washington D. C., en EE. UU. a negociar por Costa Rica? En este artículo, La Nación revela quiénes son las 10 personas designadas por el Ministerio de Comercio Exterior (Comex) para volver al impuesto del 0%.
Los miembros del equipo tienen entre 23 años y cuatro años de trabajar en Comex en distintos roles vinculados al comercio internacional.
Sobre el avance de las conversaciones no se reveló nada. “Dado que el proceso se encuentra en curso, los resultados de dichas reuniones no son públicos por el momento”, dijo la viceministra y coordinadora del equipo negociador, Indiana Trejos, ante las consultas remitidas por este diario.
Para Trejos sentarse en una mesa de negociación con su contraparte estadounidense no es nuevo.
La economista y especialista en Relaciones Internacionales fue asesora de la Unidad de Monitoreo del Comercio y la Inversión y Negociadora Textil, durante el diálogo que concluyó con la firma del Tratado de Libre Comercio entre Centroamérica y República Dominicana con Estados Unidos (DR-Cafta).
Trejos laboró al lado de Anabel González, jefa de negociación del Cafta por Costa Rica; y Alberto Trejos, quien era ministro de Comercio Exterior en aquel entonces.
Las rondas de conversación para lograr el tratado de libre comercio con Estados Unidos, dos décadas atrás, eran muy distintas a la realidad que se enfrenta hoy con Donald Trump a la cabeza de la Casa Blanca.
La visión estadounidense de defensa del comercio internacional cambió a la visión proteccionista de Trump guiada por el Make America Great Again (Hacer a América Grande Otra Vez).
Sin embargo, actualmente se cuenta con herramientas tecnológicas que pueden ayudar al país en el proceso, comentaron especialistas consultados por este diario.
Las negociaciones con EE. UU. surgen tras la aplicación del “arancel recíproco” que impuso Washington a más de 160 socios comerciales, incluido Costa Rica, a partir del 2 de abril pasado.
La tarifa para Costa Rica inicialmente fue del 10% y luego la administración Trump la elevó al 15% a partir de agosto, debido al superávit comercial a favor de nuestro país.
Además, Costa Rica busca evitar el castigo para las exportaciones de dispositivos médicos, el principal producto de exportación cuyo principal mercado son los Estados Unidos.
¿Quiénes forman el equipo negociador?
Indiana Trejos señaló que el equipo negociador lo lideran los jerarcas de la institución, es decir, ella junto a Manuel Tovar, ministro del Comex.
El grupo lo conforman negociadores de la Dirección General de Comercio Exterior y de la Dirección de Inversión del Ministerio.
Junto al ministro y la viceministra están José Carlos Quirce Rodríguez, Karina Herrera Rodríguez, Marcela Chavarría Pozuelo, Alejandra Porras González, Pamela Sittenfeld Hernández, Karen Chan Sánchez, Julián Aguilar Terán e Isabel Hernández Ruiz.
Los salarios mensuales del equipo negociador oscilan en un rango de ¢3 millones y ¢6,1 millones, según la información remitida por la institución.
A ocho de los 10 negociadores la remuneración se les paga mediante el Convenio Comex-Procomer, cuyo objetivo cuyo objeto es proveer al Ministerio de Comercio Exterior de apoyo financiero y técnico en el cumplimiento de sus funciones.
En setiembre pasado, Tovar comentó a La Nación algunos detalles del avance de las negociaciones, cuyo objetivo principal es recuperar el beneficio de una tarifa arancelaria del 0% lograda en el marco del DR-Cafta.
Dicho acuerdo comercial está vigente en Costa Rica desde el 1.º de enero del 2009.

El rol de los negociadores
El papel del equipo toma relevancia en el contexto actual, ya que se trata de la segunda ocasión de pláticas de gran magnitud con el principal socio comercial del país, destino del 47,4% de las exportaciones de bienes, equivalentes a $9.019,9 millones, según los datos de Promotora de Comercio Exterior (Procomer) acumulados a octubre.
Las negociaciones previas entre ambas partes, que generaron controversia y expectativa en Costa Rica, se desarrollaron durante el Cafta, que constó de 10 rondas de negociaciones entre enero del 2003 y enero del 2004.
Costa Rica concluyó las negociaciones en una fecha diferente a la de sus vecinos centroamericanos. El acuerdo derivó en un referéndum nacional y fue firmado en agosto del 2004.
El exjerarca del Comex, Andrés Valenciano, indicó que varios de los actuales negociadores participaron directamente en el proceso del DR-Cafta. Consideró que el equipo técnico del Comex ha sido, por años, uno de los pilares de la política comercial del país.
Valenciano recomendó confiar en este equipo “y darle el espacio” para hacer lo que mejor saben hacer: aportar evidencia, analizar escenarios con seriedad y asegurar que las decisiones del país se tomen con base en criterios técnicos y estratégicos.
“Estoy seguro de que cuentan con todas las capacidades para desempeñar un trabajo responsable y de alta calidad en este momento”, aseveró.
Por su parte, John Fonseca, exviceministro del Comex, señaló que el tamaño del equipo —10 personas— puede resultar adecuado si aprovechan plenamente las herramientas tecnológicas y analíticas disponibles hoy, que permiten una modelación y anticipación de impactos mucho más sofisticada que en la época de la negociación del tratado de libre comercio.
“No se trata de replicar la estructura negociadora del Cafta, porque el contexto y la naturaleza del proceso son completamente distintos, pero sí conviene asegurar la rigurosidad técnica, la coherencia institucional y la visión estratégica de aquel proceso, ahora potenciadas por capacidades intersectoriales, tecnológicas y analíticas que hoy le permiten a Costa Rica negociar con mucha mayor precisión y visión de futuro”, señaló Fonseca.
Lecciones aprendidas
Sobre las lecciones del Cafta, Fonseca destacó la necesidad de un marco de gobernanza claro, la disciplina de sustentar cada posición con análisis técnico, y el valor de una interacción estructurada con el sector privado.
El exministro Marco Vinicio Ruiz recomendó al equipo negociador presentar propuestas bien documentadas y enfocarse en demostrar la conveniencia para Estados Unidos de una alianza “ganar-ganar”.
“Somos suplidores de empresas norteamericanas que compiten en el concierto internacional, somos aliados y no adversarios. Esto debe demostrarse con los documentos que se aportan”, opinó Ruiz.
En tanto, el excanciller Manuel González Sanz añadió que, a diferencia del Cafta, cada caso y situación es distinta. “Esta no es una renegociación integral del Cafta, por lo que el ámbito de acción y el grupo debería ser más reducido”, afirmó.
Mencionó que la eliminación de la tarifa arancelaria del 15% para los productos agrícolas, anunciada por la administración Trump a mediados de noviembre, representa un logro del equipo negociador, que mantiene un bajo perfil público.

