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“He pintado a Guanacaste como nadie más lo ha hecho: con una mirada profunda que retrata el esplendor de esa tierra, de su ganado y de su naturaleza generosa”, dijo a La Nación el reconocido artista plástico, Isidro Con Wong, en el 2011.
Dolorosamente, este domingo 1.º de setiembre ese “mundo maravilloso” guanacasteco se quedó sin Con Wong, el hombre que durante más de cinco décadas miró a la pampa con su particular y mágico prisma. El querido artista costarricense falleció a sus 93 años, informó su familia.
Con su partida también se quedaron huérfanos sus míticos toros, los astros que trazó y los paisajes que imaginó con densos bosques multicolores.
Don Isidro fue uno de los mayores exponentes de la pintura y escultura en Costa Rica, siendo distinguido con el Gran Premio Internacional de Montecarlo en 1988.
El artista nació en Puntarenas, en 1931. Fue hijo de una pareja originaria de China y durante sus primeros años se trasladó a este país asiático para realizar sus estudios. Tras estudiar en suelo chino, regresó a Costa Rica, donde se estableció en la provincia puntarenense durante muchos años.
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De acuerdo con su sitio web, la obra de Wong se desarrolló en varios movimientos artísticos y etapas: Realismo mágico, Monocromos, Realismo Fantástico, Bicolor, Transición, Dibujos, Caligrafía Fantástica y Esculturas.
Hasta el momento se desconocen las causas de la muerte del artista.
Hasta las 2 a. m. de hoy domingo, el cuerpo de Con Wong está siendo velado en la funeraria Jardines del Recuerdo, en Barrio Don Bosco, San José. La misa fúnebre se llevará a cabo este lunes 2 de setiembre, a las 10 a. m., en el templo católico Don Bosco.
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La vida y legado de Isidro Con Wong
Además del arte, Isidro se dedicó a la agricultura, la pesca y la ganadería en Paquera y el Golfo de Nicoya. Desde los 40 años ejerció profesionalmente el arte y expuso su obra en países como Estados Unidos, Francia, Italia, España, Japón, Taiwán, Panamá, Colombia y Venezuela.
Sus primeras exposiciones individuales fueron en 1979 y de manera colectivas desde 1981. Entre estas se destacan sus seis participaciones consecutivas en el Grand Prix Internacional de Arte Contemporáneo de Montecarlo, en Mónaco.
Recibió varias distinciones internacionales como el Honor Princesa Carolina de Monte Carlo y también fue reconocido como miembro de honor de la Academia Europea de Ciencias y Letras de Niza, Francia. A nivel local, fue declarado Ciudadano de Honor por la Asamblea Legislativa en 2021.
Con Wong se mantuvo activo en su taller hasta sus últimos años de vida. En junio de 2021, la comunicadora Patricia León Coto lo visitó en su área de trabajo como parte de un artículo para la sección Áncora de La Nación. León hizo una reseña sobre la obra artística del costarricense:
“Han dicho que el arte de Isidro Con Wong tiene ese realismo mágico que hizo inmortal a Gabriel García Márquez. Y llevan razón. De la misma forma que en Cien años de soledad el cura Nicanor levita como si tal cosa pero después de tomarse una tacita de chocolate, o Remedios la Bella se va al cielo mientras tiende sábanas blancas en el patio, los toros de Con Wong pueden estar suspendidos en el aire a metros del suelo, o salir de la boca de un pez enorme o caminar pesados en fila india sobre las ramas quebradizas de un árbol”, escribió la periodista jubilada.
Admiración por el maestro Isidro Con Wong
En el 2023, la Galería Nacional del Centro Costarricense de Ciencia y Cultura, albergó la exposición El mundo mágico de Isidro Con Wong. Esta exhibición recogió 57 pinturas en medianos y grandes formatos, así como siete esculturas en bronce del artista, como un homenaje a su más de medio siglo de trayectoria.
Elizabeth Barquero, directora de la Galería Nacional, conoció a don Isidro y su obra muy de cerca. Barquero conversó con La Nación sobre la profunda admiración que siente por el pintor y escultor costarricense y dio detalles sobre su legado.
La relación entre la historiadora del arte y Con Wong data de hace más de cuatro décadas. Inició cuando Barquero visitó al artista cuando ella formaba parte del equipo del programa televisivo Atisbos, dirigido por Guido Sáenz.
“Yo pude seguir durante todos estos años el desarrollo de ese artista. Primero con lápices de color, empezando a ver ese mundo sin una formación académica, pero de una manera muy honesta. Fue avanzando, siempre con una mirada casi de niño, explorando en Puntarenas, ese lugar donde él nació”, comentó Barquero.
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“Nos dio una propuesta de ese mundo mágico que lo rodeaba. Lo hizo sin artificios, solamente con el deseo de comunicarnos cosas con su arte”, añadió.
Además, Barquero recalcó que la huella de Con Wong fue profunda en Costa Rica y que demostró que el arte puede hacer soñar a las personas. Según la jerarca, don Isidro plasmó en sus obras su cosmovisión, muy relacionada con los planetas, las estrellas y la influencia de la cultura de China.
Por otra parte, Diana Zuleta, quien en el 2021 trabajó en Estrellas negras, espectáculo que realizó la Compañía Nacional de Danza en homenaje de Isidro Con Wong, dijo que para ella fue “maravilloso poder conocer al artista”.
Como parte de Estrellas negras, Zuleta realizó una curatoría de las obras de Con Wong y tuvo un contacto muy de cerca con el artista y su familia.
“Él era una persona muy vivaz, a pesar de que tenía cierta restricción en su movilidad era muy independiente. Hasta coqueto, nos enseñaba fotos de su juventud y con él se pasaban ratos muy amenos. En una de las ocasiones yo andaba mi Ipad y él me hizo un dibujo, así que yo tengo no sé si el primer o único dibujo digital de don Isidro”, relató la artista.
La diseñadora compartió con La Nación un fragmento de una grabación que realizó durante una de sus entrevistas al pintor costarricense: “Yo lo que puedo decir es que seguiré pintando con mi alma, seguiré viviendo mi verdadera vida, seguiré hundiendo, hundiendo para ser escultor de bronce, el bronce que es casi eterno”, se oye decir a don Isidro en el audio.
