
“Todo mal” se escuchó en un grito poco antes de que oficiales de la Fuerza Pública ingresaran a un búnker que ha sido foco de venta de drogas, amenazas, balaceras y otros delitos violentos en los últimos días en María Reina de Hatillo.
Al escuchar la frase, que avisaba sobre la presencia de la policía, varios sujetos en las cercanías huyeron en cuestión de segundos y dejaron una estela de droga que forma parte de un decomiso de 2.388 dosis de cocaína, marihuana, ketamina, crack, tusi, éxtasis y cristal.
En las cercanías de este búnker se ubicó este miércoles un cilindro de gas azul con 673 dosis en su interior. El resto de la droga se incautó en un punto de venta conocido como la “T”. En ese sitio, un hombre que resguardaba el lugar huyó con una bolsa de supermercado y la lanzó sobre el techo de una de las viviendas.
Tras revisar la bolsa, los oficiales confirmaron que estaba colmada de sustancias. Ninguna persona fue detenida durante el operativo y las dosis se decomisaron para su destrucción.
María Reina, situada a solo cuatro kilómetros del centro de San José, es un punto de dolor para las autoridades. No importa cuántos operativos se ejecuten en la zona, en poco tiempo, las estructuras se reacomodan y esa venta a cielo abierto de narcóticos vuelve a “prosperar”.
Operativos previos
El 4 de diciembre, un megaoperativo de 13 allanamientos, ejecutado en una sola tarde, culminó con el decomiso de 14.000 dosis de diferentes drogas, así como diez personas detenidas que, en apariencia, integran la organización narco que opera con violencia en ese punto.
Algunos de los aprehendidos tenían antecedentes por homicidio, consumo y venta de drogas, lesiones, amenazas contra la mujer y otros delitos.
Tras el operativo, el fiscal adjunto, Mauricio Boraschi, quien ha participado en decenas de intervenciones policiales y judiciales en la zona, describió el sitio como el “mall de las drogas en la capital”.
Desde María Reina salen la cocaína, la marihuana y el crack que pueden abastecer a delincuentes y comerciantes del resto de la capital e incluso de ciertos puntos del país.
Una semana más tarde, oficiales del Grupo de Acción Operacional (GAO) y de la Fuerza Pública decomisaron casi 5.000 nuevas dosis de drogas y dos armas de fuego en operativos para combatir la criminalidad en la zona.
Ese día, las autoridades sorprendieron a dos sujetos que llevaban dos bolsas; al ver a las autoridades, huyeron y tiraron los paquetes, informó el Ministerio de Seguridad Pública.
