David Trezeguet aún tiene estampa de futbolista. Es delgado y serio, pero saluda con una sonrisa y un apretón de manos. El campeón del mundo de Francia 98 es un tipo educado, que responde a las preguntas con holgura y diplomacia. Quien fue el 9 clásico de la selección gala, hoy aguarda con curiosidad para mirar en Rusia a Costa Rica, un equipo que no tiene al típico centro delantero.
En la Sele no hay un Trezeguet. Dice Óscar Ramírez que lo buscó pero no apareció. No hay un 9 con buen cabeceo, que mire el área como su hábitat natural y disponga de un olfato goleador agudo. Por lo visto, la premisa de la Tricolor es aprovechar las fortalezas de los futbolistas que sí están disponibles, de acuerdo con las debilidades que presente el rival de turno.
Por ejemplo, Marco Ureña. El atacante rápido que se mueve al espacio y a la espalda de los zagueros. O Joel Campbell, desequilibrante y capaz de cubrir la pelota.
Trezeguet está en Costa Rica. Referencia a Bryan Ruiz y Joel Campbell, pero reconoce que la ausencia del típico delantero de raza, tal como lo fue él, le parece interesante.
"Las cosas han cambiado y los sistemas de juego también. Es verdad que la solución del nueve de área es factible para muchos equipos, pero evidentemente al no tener esta posibilidad Costa Rica buscará otras soluciones", explicó el futbolista, presente en el país por invitación de Coca Cola.
"El entrenador buscará otras soluciones. Esta ausencia también hace interesante el juego de Costa Rica y sus ambiciones, al no contar con un 9 clásico", agregó.
Ya Machillo explicó las posibles soluciones a la ausencia de un 9 clásico. Desde jugar con dos puntas hasta colocar a Waston como centro delantero, si el partido lo amerita.
El futbolista francés admite que el mundo mira con otros ojos a Costa Rica, a razón de su participación en Brasil 2014. “Las expectativas son altas”, asegura.
LEA MÁS: Óscar Ramírez tiene el dilema de sacrificar a dos centrales, ¿a cuál zaguero mandará al banco?
Mantener la base del equipo, con una estructura clara y un portero de talla mundial como Keylor Navas, hacen que el exfutbolista de la Juventus mire a la Nacional con opciones de clasificar.
"Esta es una confirmación de que Costa Rica está haciendo bien las cosas. Las exigencias son mucho más altas porque se ha creado un grupo muy interesante", recalcó Trezeguet.
El exjugador considera llamativo que en la Tricolor el peso de figura recaiga sobre un portero, cuando la mayoría de veces este papel lo cumple un hombre de campo.
No se atreve a asegurar si Keylor es el mejor guardameta del mundo, pues convivió con Gianluigi Buffon durante gran parte de su carrera y lo considera uno de los mejores de la historia.
Lo que sí garantiza es que el primer partido del Mundial frente a Serbia marcará mucho del posible éxito de Costa Rica en la Copa del Mundo.
"Es un choque de estilos, pero también vale la ambición que exista de clasificar a la siguiente ronda. Es importante que Costa Rica empiece con un triunfo, viendo que después le tocarán los dos rivales más difíciles del grupo (Suiza y Brasil). Costa Rica no tendrá que esconder su fútbol, su evolución y el pedido de todo un país de lograr un mejor papel que en Brasil", concluyó.