Le falta mucho camino por recorrer, en su voz baja y un tanto tímida evidencia que eso lo tiene claro; sin embargo, su progreso en el atletismo es una realidad tangible.
Daniel Johanning agregó otro registro a su carrera: campeón nacional de 10 kilómetros, el domingo en el campeonato nacional. A eso se une ser campeón centroamericano de 10.000 metros y subcampeón de 5.000.
El tico de 24 años recuerda que llegar a ser de los mejores atletas nacionales ni siquiera estuvo en su cabeza cuando acompañó a su papá y su hermana a una competencia en Miami.
Johanning fue un espectador más que terminó fascinado con el ambiente. Ahí empezó su historia con esta disciplina.
“Me gustó mucho y quedé con la espina de correr, en los meses siguientes mi papá me dijo que si me inscribía y corría con él”, comentó el atleta de Coopenae.
El debut fue en una competencia de su colegio, el Angloamericano, y culminó de quinto lugar en la general.
Siguió como cualquier otro atleta aficionado que asiste domingo a domingo a la cita en el asfalto, pero apenas tenía 17 años y sintió que en sus pies había talento.
Por eso tres años después ingresó a un equipo de atletismo, dirigido por su todavía entrenador, Ariel Barrantes, quien le confirmó el sentimiento que le dejó su primera carrera.
"Me dijo que me veía cualidades, que si entrenaba bastante y durante más tiempo podía llegar lejos. Le creí y seguí los consejos".
Y así fue. Los tiempos iban bajando y demostrándole los frutos del proceso. Coopenae lo fichó en 2016 y trabaja en mancuerna con Mauricio Méndez, entrenador de este equipo.
En 2015 Johanning hizo 33:19 en los 10.000 metros, después bajó a 32:36, luego a 31:33 y hoy está en 30:50.
Igual de evidentes son los números en 5.000. Empezó con 15:51.0, al año siguiente hizo 14:44, después 15:12 y este año su reloj marcó 14:46.
"Estoy muy contento por como se han ido dando las cosas, se ha mantenido la mejoría a lo largo de años, pero hace falta mucho trabajo. Aspiro a mejorar más y representar a Costa Rica en competencias internacionales", agregó el estudiante de Ingeniera Civil.
En el ciclo olímpico anterior quedó fuera por algunos segundos, pero su mirada sigue puesta en esa meta, por eso se enfoca en la pista.
"En estos momentos quiero aprovechar más la velocidad y desarrollarla. Tal vez en unos años aprovecharla en distancias más largas".
Esa rapidez evolucionó desde el día que tomó la salida con su papá, con quien sigue inscribiéndose en carreras.
“Así fue como todo inició y siempre es bonito compartir el tiempo con él”.
